En esta fecha, hace una década atrás, la alegría estremecía a la región y al mundo entero. Tras casi 70 días atrapados en el yacimiento San José, a 700 metros bajo tierra, comenzaba el rescate de los 33 mineros. Hecho histórico que captó la atención de todos los medios de comunicación del país y de las grandes cadenas a nivel internacional, los que iban siguiendo e informando el minuto a minuto de esta hazaña.
Luego de transcurridos los primeros 51 minutos desde iniciado el rescate, al interior de la cápsula Fénix salía a la tierra el primer minero rescatado, Florencio Ávalos. Así sucesivamente fueron subiendo cada uno de los trabajadores atrapados, quienes fueron recibidos entre aplausos y lágrimas de emoción.
Estos acontecimientos, tanto la noticia de que estaban atrapados como el rescate, dieron la vuelta al mundo. Instancias que deben dejar aprendizajes y, aunque hubo un resultado exitoso, ojalá nunca más vuelvan a ocurrir.
En el último tiempo las empresas mineras han enfocado sus esfuerzos en la seguridad y evitar accidentes dentro de las faenas, lo que ha dado resultados positivos, manteniendo una tendencia a la baja en cuanto a accidentes mineros con resultados fatales, lo cual se corrobora con los datos del último informe de accidentabilidad minera del Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin). Pese a ello, aunque puedan ser una minoría, siguen ocurriendo.
Puede sonar ambicioso pretender llegar a cero accidentes en las faenas, pero ¿por qué no? Estamos hablando de vidas humanas en riesgo, que a un mínimo descuido el "adiós" que le dijeron a sus familias al salir a trabajar puede ser definitivo.
Aquí recae la importancia de fortalecer, entre las múltiples aristas que se pueden abordar, la capacitación de todo el personal que ingresa a las minas y una fiscalización permanente y oportuna a las faenas para velar que cumplan con las medidas de seguridad adecuadas para el desempeño de sus trabajadores.
Además, sumado a ello, en la actualidad otro gran desafío en seguridad que debe enfrentar el rubro minero es impedir brotes laborales de covid -19.