Cerca de 14 mm. de agua caída registró durante este miércoles Copiapó en un fenómeno que llamó la atención del meteorólogo Gianfranco Marcone por la cantidad y porque se vivió una "isla de precipitaciones" que terminó concentrando el paso del sistema frontal en la capital regional. Sin embargo, para ciertos sitios como la Alameda, calle Ramón Freire, Circunvalación, sectores altos y el centro, entre otros, no se trató de un asunto novedoso y nuevamente viviendas y calles sufrieron los estragos de unas precipitaciones. Esta vez no pasaron aluviones destructivos, pero sí el agua corrió por diversos puntos sin control e incluso vecinos pusieron una cinta en Freire para evitar el paso de vehículos y personas. El nylon, además, no fue suficiente para todas las necesidades de sectores más vulnerables y de clase media.
En una de las capitales de la minería aún se convive con la falta de progreso y planes parche para estos sitios. Se avanza bien en proyectos como el parque Kaukari, cuya tercera etapa ya comenzó a concretarse con obras que comenzaron hace unas semanas, pero iniciativas como colectores de aguas lluvias quedan rezagadas pese a que hace años se ha mencionado la necesidad de tenerlas en distintos puntos. Vecinos de sectores como la Rinconada de San Fernando, de los cuales varios de ellos perdieron sus elementos por los aluviones de 2015, han pedido hace mucho un colector, pero pareciera que pierden importancia especialmente en contextos como la pandemia, que termina "haciendo olvidar" este tipo de asuntos.
En el marco de la opción de que las lluvias sean más habituales de lo común durante este invierno en Copiapó, no parece preciso estar constantemente trabajando bajo la lógica de las medidas de emergencia, como la entrega de nylon, sino que más bien se debe actuar bajo la lógica de la prevención y maximizar los esfuerzos por llegar a los puntos más críticos.
Lamentablemente aquella etiqueta de ser una de las capitales de la minería no se condice con el desarrollo de una buena calidad para miles de personas, que cada vez que saben de estos pronósticos desean que la lluvia no sea tan fuerte.
Lamentablemente la del miércoles tuvo una gran caída de agua para la realidad copiapina y causó diversos estragos.