La prioridad del agua debe ser resuelta y qué mejor que restituir este recurso a propiedad del Estado. Semanas antes de la declaración de pandemia por coronavirus, la preocupación en nuestro país era la sequía. En Atacama, uno de los desiertos más áridos del mundo, esta situación es endémica.
Este "estrés hídrico" ha sido un tema sufrido por varias regiones. En Atacama, asumida la democracia el primer Intendente de la época, Raúl Barrionuevo, fue la construcción del Embalse Santa Juana, la primera gran obra, permitiendo asegurar el agua para la agricultura del valle Huasco.
El Ministerio de Obras Públicas liderado por Ricardo Lagos Escobar, dio solución a la distribución continua y sin racionamiento para Caldera y Chañaral, solucionando además a la localidad de Domeyko y gran parte de Alto del Carmen, con este vital elemento.
Sin embargo, en pleno siglo XXl aún existen problemas con el recurso hídrico en lugares emblemáticos como Totoral, que producto de la política implementada en dictadura de privatizar el agua y entregarla para su negocio a manos privadas, carece de abastecimiento para su consumo y la agricultura campesina. También se han agotado algunos acuíferos en Domeyko y localidades aledañas al límite con la región de Coquimbo.
En este contexto, el Consejo Regional de Atacama ha destinado este año, recursos FNDR para mejoramiento agua potable rural (APR) en localidades sin abastecimiento y con serias dificultades en la distribución. Para Quebrada Valparaíso en Vallenar, aprobamos más de 558 millones de pesos. Lo mismo hicimos con otros proyectos APR para las Provincias de Huasco y Copiapó, por 863 millones de pesos, favoreciendo a: Cachiyuyo, Chañar Blanco, Imperial, El Tránsito, El Coral, Chollay, Las Tablas, Carrizalillo, Totoral, Amolanas Las Vizcachas. Sin olvidar, la aprobación para Transferencia Programa Fomento al Riego de Organizaciones de Usuarios del Agua, por 6 mil millones de pesos.
La situación es compleja. En esto trabajamos como CORE Atacama, junto a técnicos y sectorialistas, para ir en la solución correcta a tan grave problema. La prioridad del agua debe resolverse y ser restituida al Estado. Para ello, necesitamos una Nueva Constitución y el plebiscito del 25 de octubre, será clave para construir "una casa de todas y todos" con justicia social y sin discriminación.
Ruth Vega Donoso
Presidenta del Consejo Regional de Atacama
