El ejercicio militar realizado en el altiplano desde el 27 de abril de 2024 por la Brigada Motorizada N°24 "Huamachuco", de la VI División del Ejército, cobró la vida del soldado conscripto Franco Vargas (19). Adicional a ello, otros 45 conscriptos presentaron cuadros infecciosos de origen respiratorio y gastrointestinal, razón por la cual se encendieron las alarmas al interior de las filas de la institución castrense.
Pues resulta que con el correr de los días, el testimonio de los afectados y familiares de los soldados conscriptos dan cuenta, como mínimo, de una mala práctica por parte de los superiores que tenían a cargo a los 245 soldados que formaban parte de la división.
Y es que el balance del ejercicio militar no es para nada bueno, dos soldados fueron conectados a ventilación mecánica y uno de ellos incluso arriesga perder una de sus extremidades. Por si esto fuese poco, hay no pocos testimonios relacionados a humillaciones durante el entrenamiento, cuyas versiones no coinciden para nada con la entregada por el Ejército.
Los jóvenes sufrieron un shock grupal a raíz de la muerte de Franco, que era catalogado como un buen compañero por sus pares, esto ha acarreado severos problemas de salud mental e incluso intentos de suicidio. Dado ese contexto, el Ejército tomó la decisión - informada mediante comunicado - que 39 soldados que participaron del fatal ejercicio militar, no continuarán con su servicio militar obligatorio.
Aunque el Ejército no lo quiera, este negligencia trae al recuerdo la Tragedia de Antuco, no por su mortalidad (pues en Antuco murieron 44 soldados conscriptos y un sargento segundo), sino por la cuestionable toma de decisiones de quienes estaban a cargo de la brigada, debido a la falta de juicio crítico de los oficiales, de los cuales se espera que sean sancionados (aunque si son sometidos a justicia militar, difícil).
Tampoco llama a la esperanza que los oficiales sean sometidos a la justicia civil, pues basta recordar el castigo recibido por los oficiales a cargo del ejercicio militar en Antuco, que no fueron nada proporcionales al daño ocasionado. Ojalá que al menos, este caso permita alguna reforma en las Fuerzas Armadas.