El Kremlin niega que Putin ordenara asesinar a Prigozhin
GUERRA. Fueron halladas las cajas negras del avión siniestrado.
El Kremlin salió ayer en defensa del presidente ruso, Vladimir Putin, considerado unánimemente por la prensa independiente y la oposición el principal sospechoso tras el siniestro del avión del jefe del grupo de mercenarios Wagner, Yevgueni Prigozhin.
"Es todo mentira", dijo el vocero de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov.
Putin ya había roto su silencio la víspera transmitiendo sus condolencias por los diez fallecidos en la catástrofe aérea y alabando la figura de Prighozin, pese a haberle acusado de traición hace sólo dos meses, cuando se sublevó contra el Kremlin.
Peskov acusó a Occidente, que apoya a Ucrania en la guerra con Rusia, de dedicarse a "especular" y presentar hechos desde "un determinado ángulo".
"Al abordar ese tema, hay que basarse en hechos", indicó, al tiempo que reconoció que éstos, por el momento, "no son muchos", porque hay una investigación en marcha. Y parafraseó a Putin al asegurar que la investigación concluirá "en un futuro no muy lejano".
Le intentó echar una mano el presidente de Bielorrusia, Alexandr Lukashenko: "No puedo decir quién lo hizo. No voy a hacer de abogado ni siquiera de mi hermano mayor. Pero conozco a Putin (...) Por eso no puedo imaginar que lo ha hecho Putin, que Putin sea culpable".
Cajas negras
El Comité de Instrucción de Rusia (CIR) informó ayer que encontró las cajas negras del avión privado Embraer en el que viajaba Prigozhin.
"La investigación ha recuperado las cajas negras. Continúa el estudio pormenorizado del lugar del siniestro", informó el CIR a las agencias locales.
Añadió que se están recuperando diferentes objetos y documentos que son fundamentales "para esclarecer las circunstancias de la catástrofe aérea".
A su vez, el CIR explicó que para, identificar a los ocupantes del aparato, se tendrán que realizar "exámenes genéticos moleculares" (de ADN). "En el lugar del accidente se encontraron diez cadáveres", agregó.
Debido al impacto del avión contra tierra, en la región central de Tver, los tres tripulantes y los siete pasajeros resultaron carbonizados.