Pisco: Identidad y Turismo
El pisco producido en la región de Atacama tiene una fuerte carga cultural y patrimonial; es un producto de alta calidad, cuya producción cuenta la historia de siglos de elaboración artesanal. Alejandro Martín Caro, Director Sernatur Atacama, Isidoro Juan Zambrano Soto, Doctor en Filosofía y Ciencias de la Educación Consultor Educacional
Myo es el mes que evoca las grandes hazañas marítimas que cada año se conmemoran en torno al "mes del mar".
Sin embargo, mayo trae consigo en el calendario otra fecha importante que es parte de la identidad nacional, y que en nuestra región se ha definido como un eje de trabajo para potenciar la imagen de Atacama dada su gran importancia no solo como producto, sino como parte de la identidad local: El Día del Pisco.
El pisco producido en la región de Atacama tiene una fuerte carga cultural y patrimonial; es un producto de alta calidad, cuya producción cuenta la historia de siglos de elaboración artesanal, su desarrollo actual y formas de vida de ayer y hoy, principalmente en el Valle del Huasco y de manera muy particular en las provincias de Copiapó y Chañaral. Y gracias a esa historia, la actividad turística se ha visto beneficiada con el desarrollo paulatino de nuevos productos turísticos vinculados a los productos agroalimentarios, que permiten vivir la experiencia de la producción y de la naturaleza que rodea de este noble destilado.
Este 15 de mayo se celebra el Día Nacional del Pisco, y es por ello que junto con las actividades que se impulsan desde lo público y lo privado para conmemorar este gran hito, durante todo el mes, también existen iniciativas de trabajo permanente que buscan el desarrollo integral de la industria, considerando con ello, el desarrollo turístico territorial del valle, que, sin lugar a duda, tiene un gran desafío por delante. La Mesa Regional del Pisco, el programa PTI del Valle del Huasco de Corfo, las acciones y actividades que han desarrollado las diferentes municipalidades del valle, el trabajo con Pisco Chile, el Apoyo de Sernatur y Prochile con fondos del Gobierno Regional, entre muchas otras, consideran al turismo como uno de sus ejes de desarrollo asociado y generan un gran aporte para levantar el destino y posicionarlo en el mercado nacional, junto al resto de las denominaciones de origen y productos locales que tanto representan a los Atacameños.
En el desierto más árido del mundo, un valle y una viña se transforman en un oasis para quienes buscan la desconexión con el mundo actual y la conexión con lo natural y lo patrimonial, elementos diferenciadores que nos permitirán el desarrollo turístico de nuestra hermosa región.
Crisis de autoridad
En estos días, llenos de noticias lamentables, violentas y agresivas; que muestran una abierta crisis de autoridad, caracterizada por las habituales agresiones que sufren las personas y organizaciones de distinto tipo, observamos de manera muy lamentable la transgresión permanente a las normas, leyes y buenas costumbres, tan necesarias para una convivencia armónica que tanto necesitamos; y ello es más grave aún, cuando observamos atónitos, que entre quienes transgreden dichas normas sociales, no son precisamente aquellas personas, que al parecer, por sus actos, han dejado simplemente de ser personas de bien, sino por aquellos otros, que pese a su condición y educación, obran de manera totalmente impropia y antisocial, como lo ha hecho el mal llamado profesor Roberto Campos, recientemente involucrado en un nuevo acto violento e indecoroso, publicado por numerosos medios de comunicación social, como fue rayar el frontis de la famosa e icónica Iglesia San Francisco de Santiago y quién el año 2019 hiciera noticia durante el estallido social, por haber destrozado un torniquete del metro de Santiago, de quién los medios de comunicación, lamentablemente, lo han presentado como profesor, y que hoy de acuerdo a dichos medios, no es tal, tratándose a Dios gracias, solo de un enseñante de matemáticas, pero jamás de un profesor; por ello, como docente profesional y de vocación, levanto mi voz para enaltecer a mis colegas docentes, que con tanta vocación trabajan con nuestros niños y jóvenes, mostrándoles el camino fértil de una educación para el bienestar de todos los seres humanos.
Estos deplorables actos, realizados por este mal llamado profesor, quién ha sido protagonista de ellos, distan absolutamente de los objetivos fundamentales de la educación chilena, lo que deja nuevamente sobre la mesa, la brutal crisis de autoridad que estamos tristemente sufriendo estos últimos años, y que de no tomar las medidas apropiadas ahora, el tema se agudizará, generando indeseadas situaciones sociales, que podrían afectar gravemente nuestra convivencia social.
Espero y confío que este nuevo y lamentable acto antisocial, no sea la futura fotografía de un sistema social totalmente en crisis, una educación en crisis y una autoridad en crisis, donde no se observan los cambios que nuestra sociedad está pidiendo a gritos… se trata simplemente, de fortalecer la autoridad, hacer cumplir las leyes y las buenas costumbres.
Sabemos que educar es un desafío cultural y social de insospechadas dimensiones y estos lamentables hechos, no hacen otra cosa que socavar la labor docente, por lo que espero que estas líneas, llamen a nuestras autoridades a fortalecer la educación y a quienes se preparan para educar, fortaleciendo su labor y autoridad. Es muy lamentable, que con todo lo dicho, se olvide el rol básico de la educación, que no es otro que formar buenas personas y buenos ciudadanos, cuya responsabilidad, descansa fundamentalmente en la autoridad de los padres de familia y de los bien llamados profesores y las autoridades.