Correo
Niñas y ciencias
El 11 de febrero se celebró el día internacional de la mujer y la niña en la ciencia, fecha proclamada por la Asamblea General de las Naciones Unidas, conmemoración relevante para todas las entidades comprometidas con la educación y que apuestan por avanzar en la equidad de género. Según datos del último informe de Unesco, una de cada tres investigadores es mujer, por ello cobra relevancia, que desde la educación inicial se propicie una participación igualitaria en todo tipo de experiencias de aprendizajes.
La indagación y observación del entorno que los rodea, la experimentación con los elementos que tienen a disposición, permiten que niños y niñas con su diversidad, respondan y realicen consultas para satisfacer su curiosidad natural.
Cuestionar y reflexionar sobre los fenómenos naturales o situaciones cotidianas de su entorno, les permitirá, en un futuro, convertirse en seres reflexivos, críticos y analíticos. Para ello es clave que las y los adultos movilicemos a niños y niñas, invitándolos a observar u explorar objetos, seres vivos o situaciones cotidianas. Junto a ellos y ellas podemos elegir preguntas investigables y hacer predicciones de forma lúdica.
En las salas cuna y jardines infantiles de Fundación Integra existe una intencionalidad pedagógica que se materializa a través del juego como medio para desarrollar aprendizajes, con equipos educativos preparados para guiar estas experiencias, usando la indagación y la experimentación, fomentando de esta forma el pensamiento crítico, la formulación de hipótesis y la toma de decisiones.
Resulta fundamental que se generen estos espacios equitativos, sin estereotipos, inclusivos, para que en el futuro la ciencia y la investigación se robustezca con las miradas de hombres y mujeres, a quiénes desde su primera infancia, se les entregaron los espacios para reconocer su potencial de desarrollo.
Yanira Figueroa Pequer, directora regional (i) Fundación Integra Atacama
Incendios y deficit habitacional
Como Asociación de Oficinas de Arquitectos, una vez más, nos hemos puesto al servicio del estado de Chile para aportar en las diversas soluciones que permitan disminuir el déficit de vivienda que enfrenta nuestro país, así como en propuestas para construir mejores barrios apuntando a una mejor calidad de vida de sus habitantes. Vemos con gran preocupación, frente a los incendios que hoy aquejan al Sur de Chile, cómo ese déficit se va incrementando, con la agravante máxima de pérdidas humanas, destrucción medioambiental y de nuestro patrimonio material e inmaterial.
Condenamos categóricamente la eventual intencionalidad de dichos incendios y así mismo, felicitamos la notable y necesaria coordinación público - privada, tanto nacional como internacional, así como la convocatoria a personeros experimentados de administraciones anteriores que se ha producido para combatirlos. Esto último es el espíritu que nos convoca y que siempre nos mantendrá disponibles para colaborar.
Directorio de la Asociación de Oficinas de Arquitectos
Presos políticos y obispo
En Nicaragua, el obispo Rolando Álvarez, fue apresado en agosto 2022 junto a seis religiosos y un laico. El obispo Álvarez, ha sido la voz crítica del catolicismo, frente a las violaciones a los derechos humanos en Nicaragua. El día 2 agosto 2022, la dictadura ordenó el cierre de 7 emisoras de radios católicas. Ante esto, Monseñor Álvarez expresó "Nos han cerrado todas nuestras radios. Pero, la palabra de Dios no la callarán". El 22 septiembre 2022, la policía de Nicaragua prohibió 2 procesiones católicas y la conmemoración del 453 aniversario de la traducción de la Biblia al castellano. Este 09 febrero, en la lista de 222 presos políticos que fueron desterrados por Daniel Ortega, no figura el nombre del obispo, Rolando Álvarez. A él, la policía lo sacó del inmueble donde cumplía arresto domiciliario y fue trasladado a la temible prisión de "El Chipote"; esto, por negarse a abordar el avión que llevó a los presos a Washington. La Biblia dice "Cuando mandan los malvados se queja el pueblo".
Derico Cofré
Educación entre epidemias
Desde el principio de la crisis sanitaria, la inseguridad se apoderó de las personas. La pandemia comenzó a afectar negativamente en todos los ámbitos, siendo una de las áreas más perjudicadas hasta el día de hoy la educación.
Actualmente, con la pandemia más contenida, la situación todavía no se revierte, puesto que estamos viviendo una sindemia, entendiéndose como dos o más epidemias que coexisten en un mismo período de tiempo, afectando la salud pública. Si lo vemos desde esta perspectiva, ha habido un aumento considerable de problemas de salud mental, estando también en presencia de un alza de enfermedades crónicas. Este escenario no ha sido ajeno a los estudiantes de la educación superior, así como a los de primaria ni secundaria.
Dicho lo anterior, hemos sido testigos del aumento de la deserción escolar, el cual ha sido el factor principal de preocupación en el área, traduciéndose en miles de estudiantes retirándose o congelando sus estudios, esgrimiendo motivos económicos y de salud mental.
Es así como en el último semestre, un informe del Centro de Estudios del Ministerio de Educación arrojó que en Chile más de 50.000 estudiantes desertaron del sistema escolar en 2022, lo que representa un 1.7% de la matrícula del país. La cifra corresponde a un aumento del 24% respecto del 2019, previo a la pandemia de coronavirus.
En cuanto a la educación superior, con la vuelta a la presencialidad en 2022 se evidenciaron problemas de crisis de pánico, angustia y agresividad, a tal punto que en noviembre pasado la Subsecretaría de Educación Superior presentó el Primer Diagnóstico del Abordaje de las Instituciones de Educación Superior con respecto a la Salud Mental de sus Estudiantes.
Dicho diagnóstico se enfoca, principalmente, en cómo abordamos las instituciones de educación superior los problemas de salud mental de nuestros alumnos en un contexto aún incierto, dando cuenta de que, frente a este contexto, los establecimientos debemos, con urgencia, implementar unidades de atención o apoyo psicológico, proporcionando herramientas prácticas y útiles de autocuidados a los estudiantes, que evidencien a corto plazo ambientes protegidos y de desarrollo comunitario. En consecuencia, como instituciones educativas, debemos disponer de unidades de atención o apoyo psicológico que aborden esta problemática. Tanto es así que en nuestra universidad hemos querido fomentar actividades diversas que apunten a una educación afectiva, con el fin de encarar esta realidad, y así velar por toda la comunidad estudiantil que hoy se forma en nuestra casa de estudios, para aliviar, proteger y prevenir las alteraciones de salud mental que viven algunos.
Cecilia Echeverría Jaque, vicerrectora Académica de la Universidad del Alba