Correo
Indultos I
Señor director: Reconociendo antes que nada, que es una facultad del presidente de la República, pero tras escuchar y/o leer las primeras declaraciones de uno de los indultados por el presidente Boric, que en absoluto se acercaban a las alegres, positivas, pro- familiares, inclusivas, reflexionadas, 100% democráticas, etcétera declaraciones emitidas por políticos que junto al presidente Boric aplaudían a rabiar, la mencionada decisión...
Reconociendo que es una facultad del presidente de la Republica, el tema de los indultos, pero considerando todos los esfuerzos transversales que se hacen para superar el sentimiento de inseguridad que sufren los chilenos...
¿Presidente Boric, usted sigue pensando lo mismo que dijo cuando informó su decisión de indultar, o al comprobar, que no existió una sincera reflexión, una profunda recapacitación de un beneficiado, para reinsertarse y sumarse al objetivo de sacar adelante a Chile, por la vía que usted ha explicitado, comprende, entiende usted y se hace parte de la gran preocupación e inseguridad que sienten los chilenos al respecto, siente usted presidente, que no logró satisfacer convenientemente la ecuación de justicia e igualdad que buscaba con el mencionado indulto, tras enterarse de la "incendiaria" declaración de uno de los beneficiado?
Luis Soler
Indultos II
Recientemente el presidente Boric anunció indulto de personas que participaron en la destrucción y saqueos en el marco del mal denominado "estallido social", porque de social no tuvo nada pero de delictual todo.
Pero no contesto con esto el Jefe de Estado indulto además a terroristas. Todo, en una de las más graves y delicadas crisis de seguridad que ha vivido el país. Con todo, lo lamentable es que este gobierno hace lo que quiere, cambia de parecer las veces que quiere, desconoce los acuerdos y sus anuncios, sin tener un mínimo contrapeso que le ponga límites en su actuar, en su acción desproporcionada y que sea capaz de hacer entender al Ejecutivo que debe gobernar para todos y no para unos pocos.
Este escenario no solo es triste, sino también altamente riesgoso, toda vez que presenta las condiciones para que, quien ostenta el poder, se sienta a sus anchas y haga lo que quiera.
Rodrigo Duran Guzmán
Cuando la salud mental no descansa
Comienza la época estival y son muchos los chilenos que suelen tomarse unos días de vacaciones para aprovechar de compartir con los niños que se encuentran en receso escolar. Por lo menos así se acostumbraba hasta antes de la pandemia, donde no había miedo a los contagios - como ocurrió en los dos últimos años- y la situación económica era más estable.
La situación cambió. Hace pocos días se dio a conocer el resultado del estudio "Vacaciones de los Trabajadores 2023", que realizó Mutual de Seguridad por tercer año consecutivo, el cual nos da una alerta de lo que pueda ocurrir este nuevo año: el 52% de las personas no tiene decidido o de plano no se tomarán vacaciones en 2023.
Los datos obtenidos en la encuesta son claros y categóricos. El 49% de los trabajadores ha pasado más de un año desde la última vez que se tomó vacaciones y el 21% incluso no ha vacacionado desde hace dos años o más. A ello se suma que el 44% se siente más cansado ahora que en la misma época del año anterior.
El panorama de cómo se viene el 2023 está lejos de hacer un acertijo difícil de descifrar. El estado de la salud mental de los chilenos vuelve a verse frágil ante un agotamiento evidente, la falta de descanso y los sentimientos de incertidumbre respecto a la situación económica que se alerta desde hace meses. Por lo que se hace necesario adelantarse y elaborar planes de prevención y acción que vayan en línea de entregar herramientas que permitan disminuir el cansancio físico y mental que se arrastra.
Poder evitar que -en materia de salud mental-nos desmoronemos nuevamente como sociedad requiere que todos trabajemos en ello. Mientras el mundo público y privado hacen ya lo suyo con proyectos globales que permiten apoyar a quienes han tenido intento de autolisis, hoy los espacios más pequeños- pero que también tienen gran impacto como lugares de trabajo- también deben sumarse, pues ya tienen una carta de navegación para planificar diversas acciones que apunten en la entrega de instrumentos, desde la medicina convencional y complementaria, para sus colaboradores.
Jorge Fuentes, psicólogo y director de Pranavida
Chile sin termoeléctricas
Uno de los escenarios que simuló un reciente estudio encargado por Chile Sustentable y entregado al Ministerio de Energía, es llegar al año 2030 con una salida acelerada del carbón en la matriz, y de esta forma, llegar al 2040 con una generación eléctrica basada en un 96% en renovables.
En la práctica ¿Este escenario se podría materializar? Considerando que la descarbonización depende -según el estudio- de distintas fuentes, como biomasa, energía geotérmica, solar, solar de concentración y eólica; y que ello permitiría diversificar el origen de la energía, el camino para lograr el objetivo ya está pavimentado. Recientemente, con base eólica y solar, Chile alcanzó un 27,5% de participación renovable, en la generación eléctrica de todo un año, superando al carbón, y entregando una clara señal que si bien se requieren muchas plantas, la capacidad de las energías limpias no tiene límite, y puede seguir ganando terreno a los fósiles.
La clave está en seguir estableciendo condiciones que favorezcan la inversión, en una industria que ha demostrado que la mirada estratégica y de largo plazo puede entregar réditos al país en pocos años, experimentando un crecimiento récord.
Con estos avances, Chile no solo estaría cumpliendo con las recomendaciones de la Agencia Internacional de Energía, sino que se estaría consolidando como uno de los países más verdes del mundo, a partir de una de las industrias que más influyen en el cambio climático.
Nataliia Savkiv, Solek