El año 2020 fue el último en que la piscina olímpica de Copiapó estuvo disponible para la comunidad. Desde entonces, el principal recinto municipal dedicado a la natación en la capital regional permanece cerrado. Lo que significa un perjuicio, tanto para las familias de escasos recursos, como también para los clubes deportivos dedicados a la practica de este deporte.
En el caso de las familias que no tienen los recursos para pagar una tarde en un recinto recreacional con piscina o un viaje al borde costero, recurren a alternativas que pueden ser peligrosas e incluso mortales en el Valle de Copiapó. Pues cabe recordar que hace no muchos días, un joven de nacionalidad boliviana falleció por inmersión en una posada en la comuna de Tierra Amarilla.
Capítulo aparte merecen los clubes deportivos de natación, con los cuales se tiene una deuda que se viene arrastrando por muchos años. Para empezar, estas agrupaciones solo contaban con la piscina en época de verano, y el resto del año debían enfocarse en entrenamiento físico más no entrar en contacto con el agua, dando ventajas competitivas con sus pares de otras regiones que si cuentan con piscinas techadas y temperadas. Con la piscina municipal no disponible, estas agrupaciones han debido recurrir a espacios privados que no necesariamente reúnen las condiciones para entrenar adecuadamente. Es por este mismo motivo que la capital regional necesita con urgencia un espacio que esté a disposición de la comunidad durante todo el año calendario, pero allí mismo surge la interrogante ¿Con qué recursos y dónde podría ser emplazado el eventual nuevo recinto?.
En cuanto a los fondos ¿Serán con recursos provenientes de los FNDR? ¿Alguna inversión del nivel central? ¿El mismo municipio? Y con respecto al estado de la piscina ¿los daños que han obligado a su cierre requieren de una solución definitiva, como por ejemplo echar todo abajo y hacerla de nuevo? Porque con el tiempo que no ha estado disponible sería bueno que las entidades que deben tener una voz cantante sobre la materia puedan sincerar lo que ocurre.
En fin, son interrogantes que en algún momento, y se espera que sea más temprano que tarde, sean respondidas, porque la comunidad necesita contar con una piscina en condiciones para capear el calor reinante, cuando aún no llegan los días de verano. Quizás este periodo estival ya no, pero ojalá Copiapó pueda tener un recinto adecuado el año 2024.
calor del verano?
