Correo
Mayoría de los chilenos no quiere un nueva Constitución
Señor director:
En el plebiscito de octubre de 2020 5.899.633 votaron por tener una nueva Constitución lo que quiere decir que de los 13.021.663 votantes del plebiscito de salida solo un 45 por ciento se había manifestado anteriormente a favor de iniciar un proceso constituyente. Por lo que no es verdadero decir que la inmensa mayoría de los chilenos quiere una nueva Constitución y menos aún una nueva convención.
Alfonso Campos González
Farra
Estimado director:
Hagamos memoria, el 80% de la ciudadanía en el Plebiscito de entrada, le dijo NO a la presencia de políticos (que estuvieron ó que estaban en el Congreso), por esa razón mandató a 154 personas (supuestamente independientes, ahora sabemos cuál era la realidad) para que la redactaran...
Bueno cuento conocido, no hicieron muy bien su pega, y la misma ciudadanía, más de un 60%, les rechazó su propuesta constitucional...
Resulta que ahora, todo vuelve a fojas cero, pero en realidad vuelve al Congreso, o sea va a pasar lo que el 80% de las chilenas y de los chilenos, lo que menos quería...
Qué manera de farrearse la Convención Constitucional, la inigualable oportunidad de haber hecho una Constitución, como la que le prometieron en la campaña y lo más importante, la que esperaba el 80% de los chilenos, pero qué manera de farrearse y como colofón, le entregaron la pelota a los políticos y de pasadita, la gracia, nos costó 68.000 millones de pesos, qué manera de farrearse.
Luis Soler
Símbolos patrios
Jean Chevalier define la bandera como un símbolo patrimonial de la memoria que viene a sustituir la imagen de nuestros antepasados. También señala que "el escudo es una representación del universo", que, en nuestra mirada, permite manifestar elementos visuales que rinden honor a la multiplicidad y belleza de nuestra geografía y cultura. Cirlot indica que la bandera "se coloca en lo alto de la pértiga o asta", lo cual proyecta representativamente el más alto honor de la identidad de una nación.
Aquellos elementos rememorativos de un país, como el escudo, la bandera, el himno, entre otros, son proyecciones de lo que hemos construido como identidad a lo largo de estos dos decenios. Justamente a dos semanas de celebrar las fiestas patrias, veremos cómo se utiliza la bandera en un sinnúmero de lugares.
Por lo mismo, resulta fundamental replantearse sin liviandades el peso cultural e identitario de la iconografía de los símbolos que representan nuestro país, en cuanto a sus permanencias en la memoria ciudadana y sus usos, ya que no solo es el objeto como valor, sino lo que simbólicamente se proyecta en este y lo representativo que es para nuestra historia. De lo anterior, somos nosotros quienes debemos dar garantías de su cuidado.
Sonia Martínez Moreno, académica Licenciatura en Historia U. Andrés Bello
Mérito y trayectorias educativas
A propósito del anuncio del gobierno sobre la eliminación de los Puntajes Nacionales con la nueva Prueba de Acceso a la Educación Superior (PAES), desde Elige Educar valoramos que se amplíe el concepto de mérito para destacar distintas trayectorias educativas. Este es un cambio de mirada que nos permite no solo observar un momento en la vida de las y los estudiantes -en este caso la prueba de acceso- y enfocarnos en el esfuerzo de largo aliento que, con el apoyo de sus profesores y comunidades educativas, realizan en el transcurso de todo su camino escolar.
Esta mirada es necesaria ya que no existe una sola forma de mérito y ni sola forma de detectarlo y ya ha estado presente en la creación de nuevas vías de acceso a las carreras de Pedagogía. El 2016, el país, definió que una de las formas de ingreso a carreras de educación era pertenecer al 30% superior del ranking de notas de su establecimiento, lo que -según nuestras estimaciones- permitió que 571 nuevos talentos ingresaran a estas carreras en 2022, un 6,4% del total de matriculados.
Si bien todavía tenemos desafíos en dar a conocer las oportunidades que entrega el ranking para aquellos jóvenes con talento y vocación que anhelan convertirse en futuros docentes, esta vía de acceso se ha convertido en una poderosa herramienta para abrir nuevas puertas y oportunidades a la educación superior a estudiantes de desempeño escolar destacado. El mecanismo ha sido respaldado por estudios internacionales que dan cuenta de que este tipo de indicadores son buenos predictores de los resultados y la retención en la educación superior, midiendo de forma más equitativa al no estar relacionados al nivel socioeconómico.
Estos aprendizajes sobre el valor del ranking no sólo deben permear la forma en la que se destacan las trayectorias educativas, sino que es una invitación al Estado y las universidades a salir del foco del puntaje como única vía predictora del talento de los y las estudiantes, para destacar la importancia del esfuerzo, vocación y el desarrollo integral y contextualizado del estudiantado.
Constanza Gómez, directora de Investigación de Elige Educar
Reforma previsional
Señor director:
Los resultados del plebiscito de salida fueron contundentes, y con ello un duro golpe a la propuesta original de reforma previsional, la cual ha sido postergada en varias oportunidades.
Conceptos propios de sistemas de reparto, como solidaridad intra e intergeneracional, suficiencia y sostenibilidad, difundidos ampliamente durante la campaña del apruebo, tendrán que ser reemplazadas por propiedad, heredabilidad y libertad de administración, los cuales fueron negados por la Convención Constitucional, al rechazar la iniciativa popular "Con mi plata no".
Es el momento de avanzar en una reforma previsional transversal, y por lo mismo no hay que cometer el error común de los últimos dos Gobiernos, de buscar destinar un porcentaje de la cotización adicional a un fondo de reparto, sino por el contrario, afianzar las cuentas individuales, y con algunos grados de liquidez sobre los fondos previsionales.
Eduardo Jerez Sanhueza