Frases
"Una vez más, el Gobierno improvisó"
Javier García — Alcalde de Colchane
"Si me dijeran, 'vas a ir a la U, vas a ganar un campeonato, vas a pelear un descenso', iría a ojos cerrados"
Jean Beausejour
Ex futbolista
"Una vez más, el Gobierno improvisó"
Javier García — Alcalde de Colchane
"Si me dijeran, 'vas a ir a la U, vas a ganar un campeonato, vas a pelear un descenso', iría a ojos cerrados"
Jean Beausejour
Ex futbolista
Lagos venía desde Taltal y arribó al recinto aéreo a las 15.20 horas, en una máquina pancert, al igual que la prensa que lo acompaña, que también llegó un avión de las mismas características. El Presidente Ricardo Lagos se mostró alegre y sorprendido cuando la comunidad se le acercó para saludarlo cordialmente.
Los empresarios dicen que los copiapinos merecen "una oferta integral de
productos y servicios". El proyecto
considera 200 tiendas, un multicine,
dos tiendas "ancla" y la construcción
de dos puentes de acceso. El alcalde
Maglio Cicardini informó que las obras comenzarían en marzo y dijo que será un aporte para la ciudad.
Barrick entregó ayer su reporte de resultados del cuarto trimestre y finales del año 2012. A escala mundial, la producción de oro de Barrick, en el cuarto trimestre de 2012, fue de 2,02 millones de onzas, mientras que el total del año fue de 7,42 millones de onzas.
Pascua Lama podría comenzar en
2014 a operar.
No hay dudas que la inmigración ilegal está repercutiendo en trastornos graves para la ciudadanía y otros efectos que deben ser tratados con urgencia. A la presión que están teniendo las comunas como Vallenar, se ha sumado el aumento de extranjeros involucrados en delitos durante este año en Atacama en un salto estadístico que es importante. Se entiende que la comunidad quiera una solución a este descontrol, pero lo cierto es que eso no puede ser confundido con la xenofobia que ha comenzado a crecer y que bajo ninguna circunstancia es motivo de mejoras para la situación actual.
En lo primordial, es injusto que extranjeros de bien y que buscan ser parte de Chile sean vilipendiados en la calle o en redes sociales. El ser venezolano o venezolana se está transformando en un pecado y puede provocar una marginación social que no corresponde.
En lo segundo, se puede provocar el efecto adverso y potenciar la incivilidad. El cerrarle las puertas a extranjeros para trabajar en el país solamente conlleva a la pobreza de la persona, la informalidad laboral e incluso a acercarse a redes de inmigrantes que no son las mejores.
¿No es acaso un sentir de los chilenos el incluir a los buenos elementos? Pues bien, el mandar a los extranjeros de bien a sus países o perseguirlos no se cumple con esa premisa y, por el contrario, promueve la exclusión, que es un concepto que no solamente se debe erradicar cuando se habla de lucha social, sino que debe abarcar a aquellos ámbitos como la inmigración. Excluir es promover el mal vivir de todos.
Es muy cierto que los ciudadanos deben exigir a los gobernantes un control de las fronteras, que las comunas funcionen con estándares mínimos y decentes y que cualquier persona -chilena o extranjera- que comete delitos debe ser castigada, pero esto no puede confundirse con la xenofobia que puede ir creciendo a medida que se vayan conociendo más datos y hechos.
Y si bien es difícil conocer las intenciones de quiénes están en las calles, no es necesario mostrar rabia e indignación a cada inmigrante que se ve en la vía pública. Los atacameños debemos contribuir a no agrandar el problema y mostrar tranquilidad en la vida diaria, como también cuando se está atrás de un computador o un celular en la interacción en redes sociales.
El recuerdo de los aluviones de 2015 y 2017 entre quienes vivimos en Atacama está siempre presente, como no podría ser de otra manera dados los devastadores efectos que produjeron en la comunidad. Lo volvimos a sentir en enero cuando se preveía una lluvia de alta intensidad para las zonas precordilleranas y cordilleranas de la región, una situación que desde aquellos difíciles días se repite cada cierto tiempo y que sin duda continuará cada vez que se pronostique un evento climatológico de proporciones.
Vivir y entender nuestra región es también conocer sus carencias y necesidades, es decir comprender su realidad particular. Una de éstas es la desprotección que sienten las personas ante la posibilidad de que se repita lo de 2015 y 2017. De ahí la importancia de que las importantes obras de mitigación que está desarrollando el Ministerio de Obras Públicas, que muestran un significativo avance en la Quebrada de Paipote, pero que aún tienen un largo camino para que finalicen los 7 proyectos de gran envergadura para el control de crecidas de cauces y aluviones -que además incluyen intervenciones en los ríos Salado, El Tránsito y El Carmen, Tierra Amarilla y Copiapó urbano y rural-, cuenten con una política de Estado y un fuerte apoyo por parte de las autoridades que les tocará liderar Atacama en un próximo período.
Este no es un tema menor. No sólo por el impacto que tendrán en la sostenibilidad del territorio y la calidad de vida de las personas, sino porque dada la alta inversión que consideran en el total -alrededor de mil millones de dólares, cifra inédita para Atacama-, se requerirá una coordinación con múltiples actores, colaboración y esfuerzos mancomunados, pues los mecanismos para aprobar su financiamiento aún mantienen evaluaciones genéricas y centralizadas que muchas veces no consideran las realidades locales.
Eventos climatológicos volverán a ocurrir más temprano que tarde y es fundamental que nuestra región cuente con la infraestructura necesaria para mitigarlos. Esta será una manera para que en un futuro esperemos no muy lejano las lluvias sean motivo de alegría -como tiene que ser en un contexto de sequía- y no una preocupación permanente para toda la comunidad.
Guillermo Ramírez
Presidente de la Cámara Chilena de la Construcción Copiapó