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Expedición al Ojos del Salado buscará recabar datos claves e inéditos en el estudio de la Criósfera

LABOR. El objetivo del grupo es recuperar los datos adquiridos sistemáticamente por los instrumentos instalados en lugares estratégicos y destinados a sistematizar observaciones medioambientales de la zona, comprender mejor la aclimatación humana a la altura y desarrollar protocolos científicos innovadores en las ciencias de la vida y de la Tierra.
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La Puna de Atacama y su criósfera es un laboratorio natural que nos permite acercarnos a conocer cómo funciona la vida en una de las zonas más extremas del planeta Tierra, e incluso fuera de él. Así lo entiende el Laboratorio de Investigación de la Criósfera y Aguas LICA, de la Universidad de Atacama, que lleva tiempo estudiando la zona.

Este año, dentro de sus quehaceres científicos, el LICA UDA, liderará la segunda expedición científica multidisciplinar al volcán más alto del mundo: el nevado Ojos del Salado. Son 14 investigadoras e investigadores que desde el miércoles 23 de febrero comenzarán el ascenso, el equipo de avanzada llegará incluso sobre los 6.500 metros de altura en la Puna de Atacama. La participación femenina de esta campaña es destacable, pues 6 de sus integrantes son mujeres científicas, que a la par, junto al resto de la expedición se disponen a rescatar información y ejecutar protocolos multidisciplinarios para contribuir con distintas áreas del conocimiento científico.

Ayon Garcia Piña, geólogo e investigador, ha estudiado la criósfera y los recursos hídricos del desierto de Atacama por varios años, en colaboración con distintas organizaciones y equipos interdisciplinarios. Actualmente está a cargo del LICA, laboratorio de ciencias dependiente del Instituto de Investigaciones Científico Tecnológicas IDICTEC de la UDA y encabeza esta campaña científica.

"Esta iniciativa trata de la expedición hacia uno de los lugares con mayores alturas de la Puna de Atacama, donde se ubica el Nevado Ojos del Salado, el volcán activo más alto del mundo. Estos inhóspitos parajes han sido poco explorados científicamente. Donde las condiciones de hiperáridez reinantes en la zona, lo transforman en importantes indicadores de los efectos del cambio climático sobre la criósfera y los recursos hídricos asociados. Las cuencas de la puna de Atacama corresponden a cuencas endorreicas, lo que significa que los cursos de agua no desembocan en el mar sino en lagunas, bofedales o salares." señala Ayon.

Los 14 expedicionarios y expedicionarias que se preparan para subir a lo más alto de la Puna de Atacama, durante el ascenso tendrán contactos satelitales en el que podrán comunicarse y enviar algunos archivos al equipo de soporte remoto; igualmente se realizará una transmisión en directo a través de Radio UDA. Entre la tarde y la primera hora de la noche del sábado 5 de marzo, los participantes regresarán a Copiapó. Tras un descanso, la mayor parte del grupo inicia una activa agenda de actividades, conversatorios y charlas para estudiantes, comunidad universitaria y regional para contar cómo fue esta asombrosa experiencia.

La criósfera

"La criósfera incluye la nieve y todas aquellas geoformas que almacenan hielo de forma natural como los glaciares, los suelos congelados (permafrost) las que se entienden como reservas de agua. El monitoreo de estas reservas contempla la instalación de distintos sensores, y la ejecución de estudios geofísicos que permitan entender las propiedades físicas del subsuelo como la presencia de hielo, pero también identificar la presencia de agua subterránea. Otro importante aporte cuantitativo de este ascenso es que permitirá descargar datos del Sistema de monitoreo de permafrost, instalado hace ya 5 años a lo largo de la ladera del Nevado Ojos del Salado, registrando datos de temperatura del suelo y el aire, para poder entender cómo los factores ambientales impactan en su evolución, degradación y en su rol en la hidrología de montaña." señala Ayon.

"Con los nuevos datos geofísicos buscamos entender cómo se relacionan el permafrost y los glaciares con el agua subterránea. Dichos conocimientos son de interés científico ya que más allá del aspecto medioambiental, también podría arrojar luz de cómo es la relación del permafrost y las aguas subterráneas. Los estudios que están planificados en esta expedición se vuelven vitales para el entendimiento y conservación de reservas de hielo, al igual que la biodiversidad que depende del agua de deshielo que produce la criósfera. Esto se torna aún más relevante ya que la cuenca del Salar de Maricunga sufre hoy una gran presión sobre los recursos hídricos, lo anterior asociado principalmente a la minería metálica y de manera emergente el litio". explica el experto.

Como en marte

Además de la línea de investigación de la criósfera y recurso hídrico, el estudio de las condiciones extremas del sector también resultan atractivas el programa EuroMoonMars EMM que desarrolla actividades de investigación para el análisis de datos, pruebas y desarrollo de instrumentos, pruebas de campo en análogos de la Luna y Marte, y que para esta campaña se encontrarán apoyando en el monitoreo de la comunicación y seguimiento diario a través de dispositivos satelitales y otras tecnologías.

"Esta cordillera llamada Puna de Atacama, presenta condiciones extremas de gran altitud y extrema aridez, las que pueden representar condiciones ambientales similares a las que pudo experimentar Marte durante su historia geológica." complementa Ayon.

La reacción del cuerpo humano en altura, también conformará parte del registro que aporta la expedición, pues se aplicaran protocolos médicos de seguimiento de la adaptación a la altitud; esto con apoyo de la Facultad de Medicina, la Facultad de Ciencias de la Salud, el Departamento de Química de la