Iván Arenas, Claudio Palma y Álvaro Salas invitan a una tertulia distendida
TELEVISIÓN. Los amigos conversarán sobre datos curiosos matizados con humor. "No nos meteremos en política", aseguran.
Amelia Carvallo
El trío de amigos compuesto por los humoristas Álvaro Salas e Iván Arenas, junto al comentarista deportivo Claudio Palma, armó el piloto de un programa televisivo, que presentó a TV+ en base a sus encuentros en tiempos de pandemia, lo cual finalmente cristalizó como un programa nocturno para el fin de semana.
"Mesa para 3: la última y nos vamos" se llama la apuesta en base a una conversación salpimentada de divertidas anécdotas y la buena onda que surge entre los contertulios. El espacio va sábados y domingos a las 23:00 horas.
Palma recordó cómo conoció a Salas: "A Álvaro lo veía en el estadio, desde cuando era locutor de fútbol en Valparaíso, siempre tirábamos la talla y empezamos a juntarnos, también se unía otro gran amigo que es (el actor Marcos) 'Charola' Pizarro".
Salas agregó que el verano pasado estaba en su casa compartiendo con Claudio y un amigo, cuando este último les dijo que lo ameno de lo que conversaban era muy televisivo y sería muy egoísta no compartirlo: "Iván es el mayor, yo soy el del medio y Claudio es el más joven pero tenemos tantas cosas en común, y piensa que venimos de orígenes tan distintos. Yo soy profe de música, me dediqué al humor; Iván era el 'Profesor Rossa'; Claudio es relator deportivo... pero cuando se produce la afinidad, ya está la mitad del camino dado".
"Lo otro es que somos personas conocidas en Chile y la gente quizás ya se imagina como será. Lo que sí puedo decir es que somos bien dispersos, partimos por un tema y terminamos hablando de cualquier otra cosa, pero eso mismo creo va a ser la clave que nos permita llegar a la gente", dijo el humorista.
Palma agregó que él fue quien propuso a Arenas porque lo encuentra un personaje. "Yo sabía que a Iván no le gustaba el fútbol, y yo no es que rehuya del fútbol, siempre he buscado más allá, de hecho tuve un programa que se llamaba 'Más allá del fútbol' donde mostrábamos el lado B", explicó, junto con reconocer que cuando conoció a Arenas se estaban "apretando la guata de la risa".
-Claudio, ¿qué te parece el trío que formaron?
-Somos tres tipos curiosos, sin ninguna pretensión, que quieren tertuliar, no depender del rating, no haremos el ridículo. Iván no quiere ser el tipo de los chistes cochinos, quiere retomar un poco lo del Profesor Rossa.
Cronometrado
Palma advirtió que tienen algunas acuerdos, entre ellos que a Iván no le gustan mucho los anglicismos y comparte la tendencia a hablar largo y tendido, que si no lo paran siguen de largo. "Yo tengo pegada la muletilla de decir 'aquí termino', y ¡no termino nunca! (risas), por eso tendremos el tiempo medido con un reloj de arena", dice.
-Álvaro, ¿cuáles son los ingredientes para una buena junta?
-Que entre las personas haya química, afinidad, como en este caso donde, y lo digo con todos los años que tengo en televisión, es primera vez que termina en un programa televisivo una junta de amigos. Lo pasamos tan bien cada vez que nos juntamos, que de ahí surgió esta idea.
-Claudio, ¿qué podremos ver en el programa?
-Es un programa de conversación, de muchas curiosidades, datos interesantes y, naturalmente, de risas. No nos meteremos en política, la televisión está tan plagada, tan polarizada de mala onda que nuestra invitación es a pasarlo bien. Nos vamos a reír y no vamos a tener el molde del rating. Nos mueven las convicciones, y la convicción es que sentimos desde el capítulo uno que lo pasábamos muy bien no solo nosotros, también los camarógrafos. Yo soy un poco como el moderador, es como la junta de tres jubilados que se juntan a recordar los viajes, los buenos momentos. En el primer capítulo veremos cómo llegaron a la televisión Álvaro Salas e Iván Arenas, pocos saben que ellos se juntaban en una plaza de Valparaíso a contarse chistes, y que Iván fue el utilero de Pujillay.
-Álvaro, ¿cuál es la invitación a los televidentes?
-No tenemos ninguna gran ambición como decir que este programa va a postular al Oscar, lo que sí, como va a ir el fin de semana, es invitarlos a un rato tranquilo, para que la gente se distienda en su casa, no hablamos de política, no hablamos de ningún tema conflictivo. Es compartir la conversación entre tres amigos, no somos un programa humorístico pero sí nos reímos todo el rato y la gente se lo va a pasar muy bien. Entonces la invitación es a relajarse y ver la conversación de tres amigos que, como en cualquier hogar chileno, están tomándose un traguito y compartiendo algo. Es relajo, es distensión y desconexión de las cosas duras de la vida humana.