El 11 de septiembre en Chile y el resto del Mundo
Para los chilenos significa un golpe de estado, para los Estados Unidos un atentado terrorista y para los españoles una eterna lucha de secesión. El denominador común de todos estos hitos, las heridas que hasta el día de hoy no cicatrizan.
En nuestro país, en Estados Unidos y España, esta fecha ha marcado de alguna u otra forma un punto de inflexión en sus respectivas historias repúblicanas. Para los chilenos, el bombardeo al Palacio de la Moneda ocurrido el 11 de septiembre de 1973 marcó el fin de la democrácia y el inicio de una dictadura que se prolongó por 17 años, cuyas heridas siguen abiertas hasta nuestros días.
Incluso, en la Convención Constitucional, organismo encargado de redactar una Nueva Constitución para Chile, se está buscando de alguna manera cerrar ese ciclo, con justicia, verdad y reparación para las victimas de violaciones a los DDHH.
En Estados Unidos en tanto, el 11 de septiembre de 2001 sigue siendo recordado con dolor por parte de familiares y amigos de las cerca de 3000 personas que perdieron la vida tras los atentados terroristas que provocaron la caída de las Torres Gemelas.
No obstante, este lamentable hito histórico para los Estados Unidos, sirvió de excusa para el mandatario de la época, George W. Bush, de librar una guerra que acabó por completo con Irak en la denominada "Guerra contra el terrorismo".
Mientras que en Afganistán, los talibanes lograron consolidar su poderío con el correr de los años y sus consecuencias se pueden apreciar en nuestros días, con una "dictadura religiosa" que es vista con atención por la comunidad internacional.
Por último, en España, el 11 de septiembre de 1714 ocurrió un hito que marcó para siempre a la comunidad catalana. En esa fecha, la ciudad de Barcelona cayó en manos de las tropas imperiales de la dinastía borbónica.
Cada año, desde 1886 en Cataluña se celebra a los defensores de Barcelona en el marco del "Día Nacional de Cataluña" con un matiz más bien cultural, pero que en momentos de tensión adquiere un tinte político importante. De hecho, desde 2012 a la fecha, los separatistas han cobrado cada vez más protagonismo, incluso en 2017 hubo un intento fallido de secesión que acabó con sus líderes políticos arrestados por el gobierno español, que los indultó recién en junio de este año. Dicen que el tiempo cura las heridas, pero si estas heridas son provocadas por quiebres políticos, estas pueden incluso nunca sanar si no existe la real intención de reparar el daño ocasionado. Solo basta con revisar la historia para dar cuenta de ello.