Decálogo de un proyecto ambicioso
Alberto Guerrero Zaro , Ingeniero Civil en Minas
Apropósito de todo el revuelo que ha dado el inicio de la nueva Convención Constitucional en Chile, me vino a la memoria el año 1995, cuando estaba realizando mi tesis de grado de Ingeniero en Minas , y un profesor amigo con gran experiencia en la vida, que dicho sea de paso ya partió de este mundo hace unos años atrás; me pasó un listado en papel que lo tenía guardado en su oficina . En un tono medio en broma y medio en serio una mañana de invierno en la Universidad junto con una sonrisa irónica me dijo; "ahora que vas a empezar a entrar en la vida laboral, cuando observes el inicio de un proyecto con bombos, platillos y fanfarrias, ya sea en tu vida personal o de trabajo, por ti o por otros, es muy posible que estas 10 líneas escritas en este papel que te entrego, siempre se terminen cumpliendo".
Si nos vamos a la definición de Decálogo en Internet y solo para ayudar a la memoria encontramos estas dos definiciones:
Conjunto de diez mandamientos que, según los judíos y los cristianos, dio Dios a Moisés en el monte Sinaí.
Conjunto de reglas que se consideran básicas para una actividad.
Cuando estaba entre los 20 y los 35 años de edad, aparentemente los que iban a ser los grandes consejos de la vida no tenían mucha coherencia, pero a medida que empecé a avanzar en la edad , los asuntos , los temas, los consejos empezaban a cobrar real sentido . Posteriormente cada vez que me encontraba ante un inicio de un proyecto ya sea de software , procesos , nuevas implementaciones, industriales , etc. donde las expectativas eran extremadamente altas , inexorablemente siempre se cumplirían las siguientes 10 fases:
1-. Optimismo Generalizado
2-. Etapa de desorientación posterior.
3-. Leve Desconcierto.
4-. Período de caos inmanejable.
5-. Persecución implacable de los culpables.
6-. Sálvese quien pueda.
7-. Sanción ejemplar a los inocentes.
8-. Regreso del ánimo perdido.
9-. Termino Incomprensible del Proyecto.
10-. Felicitaciones y premios a los que no participaron.
Puedo concluir como idea general acerca de los proyectos que son como barcos, que se lanzan al mar para navegar hasta un puerto que no se está seguro que se encuentra allí, pero se cree, dependiendo de la fe que se tenga. Los tripulantes son múltiples ideas, objetivos y buenas o malas intenciones , y guiados por un capitán que es la idea principal. Y cuando este barco naufraga no necesariamente El capitán, o la idea líder, se hunde con su barco, sino que muchas veces es el único salvado por las mentes de algunos ingenuos que suelen persistir en este viaje o propósito mal enfocado, para posteriormente ponerlo al mando de otro barco y correr nuevamente la travesía, con la misma fe ciega del principio; para que la providencia posteriormente se encargue de repetir el ciclo una y otra vez, algo así como un axioma inexorable.