Copiapino Marmaduke Grove Vallejos, líder de la revuelta
Año 1931, Chile vive la caída de la dictadura de Carlos Ibáñez, asumiendo la presidencia de la República Juan Esteban Montero. El gobierno de Montero debió enfrentar la agitación política producto de las intrigas de los grupos pro Ibáñez y pro Alessandri, la desvalorización de la moneda, las alzas en el costo de la vida y la creciente cesantía, producto de las crisis a las que se encuentra expuesto el modelo económico liberal. La crisis es tan profunda que el comandante en jefe de la fuerza aérea, Marmaduke Grove Vallejos, junto al joven masón y socialista Eugenio Matte, deciden dar un golpe de fuerza, para cambiar el gobierno e implantar una república socialista.
Marmaduke Grove, el copiapino, tenía un apoyo mayoritario de gran parte de la Fuerzas Armadas, que confiaban en él, Grove se fortifica en la base área del bosque con el fin de iniciar una situación pre revolucionaria. El historiador Carlos Fredes, dice al respecto que: Al mediodía, la Fuerza Aérea bajo las órdenes de Marmaduque Grove, sobrevoló amenazadoramente el centro de Santiago de Chile, arrojando sobre la Casa de Gobierno proclamas subversivas y revolucionarias. La toma del poder y el alejamiento y entrega del gobierno por parte del presidente Juan Esteban Montero son motivo de diversas interpretaciones, algunos hablan de un golpe violento, a pesar de que no hubo muertos en dicha jornada, algunos toman la versión del historiador Ricardo Donoso, que dice que a las 18 horas un grupo de 30 personas encabezados por Grove y Matte irrumpen en la oficina del presidente deponiéndole. Le corresponde al copiapino Marmaduke Grove, solicitar la renuncia a Juan Estaban Montero, en estos términos: " Excelencia , como comandante en jefe de todas las fuerzas del ejército me dirijo a V.E. En vista del aviso que no se nos podría resistencia hemos venido a tomar posesión del gobierno para implantar la República Socialista de Chile". El presidente renuncia y junto a sus ministros se retiran entregando el poder y el gobierno en manos de los revolucionarios.
La consigna de la revolución chilena había sido: Domicilar al Pueblo, Alimentar al pueblo, Vestir al pueblo. Ahora era necesario hacer realidad dicho proyecto, para ello se forma una junta de gobierno tripartita liderada por Eugenio Matte, Carlos Dávila y el general Arturo Puga. Marmaduke Grove, asumió la cartera de defensa y como hombre fuerte del Gobierno.
El gobierno tomó medidas tendientes a palear la crítica situación económica entre estas se destacan, la devolución de tomas las máquinas de coser y otros artículos de trabajo que estaban en garantía en la Caja de Crédito Hipotecario. La Caja de Nacional de Ahorro otorgó préstamos a pequeños industriales y comerciantes con el fin de reactivar la economía, se dispuso repartir raciones alimenticias a indigentes y cesante. Declaró feriado bancario con el fin de evitar fugas de capital, prohibió la salida del país de oro, joyas y otras preciosas, con el fin de evitar la bancarrota estatal. Se prohibió el lanzamiento de los arrendatarios morosos, se amnistió a los presos políticos.
Se adoptan medidas justas, que además benefician a las clases populares más desposeídas. El rumbo tomado por el gobierno no fue del gusto de Dávila, quien renunció al tercer día, lo cierto es que Dávila, estaba conspirando con el fin de poner término a este experimento democrático. 12 días después el militar Pedro Lagos, traiciona al copiapino Marmaduke Grove y a Matte, poniendo fin a la República Socialista, y con ello cortando el sueño de ver una patria más justa y con oportunidades para todos.
Guillermo Cortés Lutz
Doctor en Historia, Grupo de Estudios de Atacama GEA