Como positivo e impecable calificaron las autoridades el primer día vacunación de Coronovac en adultos mayores, proceso en el que se destacó la concurrencia de personas de más de 100 años y donde la gran mayoría de quienes se vacunaron fueron mujeres con un 66% a nivel nacional, eso al menos hasta la tarde de ayer. El 100% de los locales en el país fueron abiertos, aunque no pueden pasar inadvertidas situaciones como en Copiapó, donde la escuela Abraham Sepúlveda no pudo abrir porque no estaban las llaves, debiendo las personas que esperaban por largo rato trasladarse al Cesfam Juan Martínez, aunque luego fueron devueltas a la escuela.
En este contexto, se registró un impasse más general y más lamentable que ciertamente no ayuda en el proceso. La Facultad de Medicina de la Universidad de Chile salió ayer a respaldar el uso de la vacuna Sinovac para adultos mayores en un intento rápido por "apagar el incendio" provocado por una entrevista de la inmunóloga de esa casa de estudios superiores María Carmen Molina, quien dijo que en el caso de esta vacuna no "es tan buena la inmunidad en las personas mayores de 60", que la efectividad no supera el 50% y cuestionó un componente de la vacuna, entre otros temas. Junto a esto, dijo que ningún paciente de los ensayos realizados en Chile presentó fiebre, lo que a su juicio, es negativo dado que debería ocurrir lo contrario para activar la inmunidad innata.
La facultad rebatió que las "vacunas analizadas y autorizadas por entidades especializadas nacionales e internacionales, incluyendo la vacuna Sinovac, son seguras y han demostrado efectividad contra el virus, en especial frente a la enfermedad grave" y con ello le quitó el piso a la profesora, mientras el Ministerio de Salud, el equipo de la Universidad Católica a cargo de los ensayos de la Sinovac en Chile y la presidenta del Colegio Médico, Izkia Siches, respaldaron de una u otra forma la versión de la casa de estudios superiores.
Pero aún así, el asunto inquieta. Por meses y años, las fake news y versiones irreales de las redes sociales han crecido para mal, pero cuando una profesora de la Universidad de Chile es tan tajante, abre una caja de pandora difícil de cerrar.
Y es en este contexto, que se han extrañado dos cosas: campañas eficaces para explicar el sentido de inocular la Sinovac (por ejemplo que la vacuna es 100% efectiva para evitar casos graves de hospitalización) y las posturas de las otras universidades del país, entre ellas de Atacama, en la materia.
Estos dos elementos son fundamentales dado que estamos hablando de un proceso delicado e inédito en el país, que ante cualquier incidente o hecho anormal se transformará en una herramienta de ataque para quienes buscan sembrar inquietud y amedrentar a la población.
Ciertamente no es fácil porque conceptos como "porcentaje de efectividad para casos leves" sigue siendo confuso, pero estamos careciendo de aquellos pilares como las casas de estudios superiores y de mensajes más potentes, aunque de todas formas la población respondió al llamado a vacunarse. Si hay algo que puede sacar en limpio el Ministerio de Salud es que a pesar la crisis de credibilidad de las instituciones y dudas con la vacuna china, muchas personas recurrieron al llamado.