Fútbol y la marca de Maradona
Para bien o para mal, el "deporte rey" y el deportista argentino han demostrado que dejan huella, especialmente en sectores más excluidos. ¿Un ejemplo para surgir al tocar el cielo futbolístico o un villano por su actuar fuera de la cancha? Maradona inspiró y marcó a millones, al punto que su figura trascendió a lo artístico y lo político. Pero ¿puede ser separado el genio del hombre? La historia dará su juicio.
Marcelo Bielsa dijo el jueves a propósito de la partida de Diego Maradona, que "la pérdida de un ídolo golpea tanto a los más excluidos, a los más indefensos, porque son los que más necesitan creer que es posible triunfar", palabras que hicieron mucho sentido en el concepto filosófico que implica el "deporte rey" en distintas partes del mundo y en palabras que conectan con otras ideas propias de la gran popularidad que tiene esta disciplina.
Bielsa conecta lo de Diego con los excluidos, pero lo cierto es que esto es más amplio. Una usuaria de redes sociales recordó que "mi papá vivía en un pueblo chico de la región más piola de Chile, que es Atacama, con cuea (sic) tenían una tele en el barrio y el fenómeno Maradona los marcó, porque era un cabro pobre genio para la pelota que se paraba de igual a igual con los europeos, se vieron en él", mencionó a propósito de las críticas por la excesiva idolatría e importancia de un futbolista, como ente aglutinador de masas y como fenómeno cultural.
Como sea y sin dar juicios de valor, Maradona puede que sea la llave para entender la pasión -desmedida si usted quiere- en torno al "deporte rey". Alegría, llanto, compañerismo, abrazos que no se darían en otra instancia, gritos, descontrol, rabia y hasta agresividad son inherentes a 90 minutos de partido y fuera de éste.
¿Es tan bueno que una actividad tenga estas características?, es la pregunta que se hacen miles. En el caso de Diego, se idolatra al que hizo magia y que incluso provocó manifestaciones artísticas (motivó canciones en vida y ahora fallecido), pero fuera de la cancha cometió excesos, que a cualquier ser humano "normal" no se le perdonaría y por los que incluso estaría en la cárcel. Pero también fuera de la cancha -y como dijo Bielsa- hizo creer a millones en Argentina, Chile, Atacama y otros sitios que se puede cumplir el llamado "Sueño del Pibe".
¿El fútbol es un impulso para los más indefensos y futbolistas como Diego son un ejemplo para salir adelante? o ¿el fútbol es un tranquilizante para que las personas se mantengan alejadas de otros temas y Maradona nunca fue un héroe, sino un villano dado su mal ejemplo fuera de la cancha? La historia dará su juicio.