Octubre 2019
En el marco del histórico momento que vivimos, necesariamente requiero una pausa, para reflexionar sobre este mes de octubre, tan esperanzador, pero también de desconsuelo. Han partido de este mundo, con mínimas separaciones de tiempo, tres personas ligadas por amor y vocación al mundo de la literatura. Todas ellas impregnadas de pasión por la palabra y sus múltiples articulaciones.
A poco andar los días, recibimos otra infausta noticia, en Vallenar fallece el narrador, poeta, gestor cultural y editor Juan García Ro. (Rodríguez). Un gran tipo, afable, siempre dispuesto al dialogo, de sonrisa cómplice y de un discurso siempre esperanzador. Juan, dejó Copiapó hace muchísimos años y se radicó en Vallenar, donde llevó adelante un hermoso proyecto de editor publicando en su editorial "Mediodía en Punto" a numerosos escritores regionales y nacionales, así como su propia obra. Una acción, sin duda quijotesca, pero que realizaba feliz, por su compromiso con la literatura. Compromiso además creativo, en que deja su impronta en las temáticas que siempre desarrolló, ligadas fundamentalmente a la denuncia social y al amor. No me cabe duda, que quienes conocieron a Juan y recibieron su concejo como incipientes escritores, o quienes se dieron tiempo con él para comentar las condiciones de vida de los pobres y humildes de esta tierra, o para recriminar, como lo estampaba en su muro de Facebook, las políticas aberrantes del actual gobierno, digo, quienes lo conocieron, permanecerán por siempre con el recuerdo de Juan.
Luego, fuimos nuevamente golpeados con otra noticia. Fallece don Tussel Caballero Iglesias. Poeta, narrador, historiador, cronista, columnista, fotógrafo, hombre queridísimo en Copiapó. Autor de obras que están en el imaginario colectivo de Atacama. "y era celosa la luna cuando los hombres bajaban/ buscando vino y amores / la luna triste quedaba /.. versos construidos en el silencio de esta pampa nortina, que lo vio nacer allá en la llamada Mina Vieja, de Potrerillos. Don Tussel, un excelente conversador, enamorado de su paisaje, su gente, su terruño, la historia local, el material de toda su obra, a mucho orgullo, decía, jamás, mis cuentos, mis poemas están situados en otros ambientes que no fueran la región de Atacama, incluso su fotografía, sobre la cual destacaba la belleza del blanco y negro.
Toda región, en su marcha, tiene figuras icónicas, don Tussel entrará en ese Parnaso. Quizá en otro momento, hablaremos del Tussel creador, historiador, etc.. mi pequeño homenaje ahora va en un recuerdo: éramos jóvenes y como todo joven, rebelde, insumiso, agitado además por tiempos de lucha anti dictatorial, por tanto, poco menos que había que quemar y aniquilar todo. Cabía allí también entonces, mi discurso anti literario, anti académico, anti costumbrista, anti lirico, anti lárico, anti todo, en realidad. Exponía mis ideas con vehemencia a Tussel, él intentaba aplacar esa ira, con la cortesía y la caballerosidad que lo identificaba, intentaba y acaso era creíble, su real interés por la poesía que hacían los jóvenes en la época. Lo más probable, es que no me haya quedado nada de lo que me dijo o decía, nuestros caminos fueron muy disimiles, pero el rostro enternecido de Tussel, comprensivo y agudo a la vez, con que me miraba, no se me ha borrado, ese rostro, de esa época, lo guardo, como la mejor fotografía en blanco y negro que pudo tomar.
Ojalá, que ahora, desde donde estén, perciban lo que está pasando en el país, multitudes que exigen, dignidad, humanismo, consideración, adjetivos que estuvieron permanentemente en sus textos, y que ahora se alzan frente a la ignominia y el terror. Que el respiro de esa masa llegue a ustedes, gente de bien y los abrigue en la eternidad.
Fernando Rivera Lutz, presidente Sociedad de Escritores de Copiapó
Ciudadanismo
La multitudinaria y pacífica marcha, convocada en la Plaza Italia en Santiago y convocó a una cifra cercana al millón de personas, ciertamente es el punto de inflexión de una movilización que comenzó hace una semana. Esta convocatoria no sólo es histórica por su capacidad de convocar y movilizar, sino también porque marca el surgimiento de un concepto que no es nuevo, pero cobrará mucha vigencia de ahora en más: me refiero al Ciudadanismo.
Este concepto lo podemos entender como una configuración que se genera en tiempos democratizados, donde dominan las economías liberales y existe alternancia, tanto de derecha como izquierda, en el poder. Éstas, con el tiempo, tienden a mimetizarse ocasionando una fractura social donde lo político termina siendo exclusivo de una minoría dirigente con el consiguiente orden civil imperfecto, pero siempre mejorable.
Lo que estamos viviendo en Chile es la irrupción protagónica de los ciudadanos, quienes pasan de años de postergación y resignación a ser los principales arquitectos de su desarrollo y bienestar. En tanto, los políticos, se sumen en un pozo profundo donde la introspección, sumado a la capacidad de escucha activa, será clave para entender este fenómeno social.
Rodrigo Durán Guzmán