El que nada debe, nada teme
Baldo Prokurica , Ministro de Minería, Fabián Baldovinos, Chief Operating Officer de Reprise
La cultura de Facebook ha sido una constante en la que la experimentación, la prueba, el error y el aprendizaje han marcado la pauta de la red social y las compañías que han adquirido y proyectos que han desarrollado en el tiempo.
Su fundador Mark Zuckerberg ha predicado un lema ya famoso en Silicon Valley y resto del mundo: "muévete rápido y rompe cosas". Parte de moverse rápido y romper cosas es integrar a las compañías en la cultura de Facebook. Una vez adentro, aún con las típicas promesas de "nada cambiará" y "todo será para bien", se avanza en la dirección que mejor le parece al Zuck (como lo llama Scott Galloway) y su equipo. Incluso aún cuando a los fundadores de Instagram se les prometió que su cultura y forma de trabajo se mantendría intacta, éste no fue el caso, provocando la salida de ambos de sus fundadores entre comunicados de prensa y rumores en el mercado.
Con estos antecedentes, ¿nos sorprende que ahora se cambien las reglas del juego para quienes utilizamos Whatsapp? La respuesta es no, de hecho desde finales del 2018 se empezó a hablar del beta en donde Facebook probaría monetizar sus audiencias, cuando era algo que "tampoco iba a suceder". La privacidad de los datos ha sido un tema candente desde hace años, más con la puesta en marcha oficial del GDPR en Europa en mayo del año pasado y la propuesta de ley de transparencia de datos (que sigue en planeación) en Chile. Sin embargo, debemos considerar que Whatsapp es propiedad de Facebook, cuyo modelo de negocio es la monetización de sus audiencias, y por supuesto de su valiosa data. ¿Y qué puede ser más valioso que la hipersegmentación que es posible realizar a través del business manager y sus capas tecnológicas? Cruzarlo con un verdadero conocimiento de esas audiencias; no sólo con aquel que uno declara como información personal en su página, o cuando sube una foto, da un like o hace un comentario que posiblemente esté sesgado por el rol que juega uno como persona en ese espacio; sino los cruces con conversaciones reales que identifiquen el momento y contexto actual por el que pasa una persona en su trabajo, su vida amorosa, y otros ámbitos. Esto es oro puro servido en bandeja de plata, tanto para los anunciantes (sean productos, servicios, marcas o políticos) como para los gobiernos y entidades financieras.
Por otro lado, ¿es esto realmente tan malo? Muchos dirán que sí, pero la realidad es que cuando uno se da un tiempo a pensarlo, los que usamos esta app obtenemos mucho a cambio: conectividad con amigos y colegas del trabajo, generación de comunidades, y además se abre la posibilidad de que deje de llegarnos publicidad no relevante para nosotros. Recordemos que, en un mundo totalmente conectado, más data significa una mejor experiencia a la larga. Por otro lado, la realidad es que muy pocas personas estarían dispuestas a pagar una anualidad por el uso de WhatsApp para no recibir anuncios.
Sin duda los cambios pueden parecer incómodos a simple vista, pero debemos tener en cuenta que tenemos opciones.
Cuando la minería avanza, Chile crece
Hace pocos días recibimos de parte del Banco Central la buena noticia que nuestra economía creció 3,7% en agosto de este año, cuya cifra es la más alta de los últimos 10 meses.
En esta línea, vemos que dicho indicador se benefició por el buen desempeño de la minería, actividad que, en este mismo mes del año creció un 5,3% según el Imacec minero.
A ello debemos agregar que el Catastro de Proyectos Mineros de Cochilco para el período 2019 - 2028, creció un 10,3% en comparación a la versión anterior, alcanzado una inversión de US$ 72.153 millones.
Estas cifras reflejan que a pesar de vernos enfrentados a la guerra comercial entre Estados Unidos y China nuestro sector continúa impulsando el crecimiento y desarrollo del país quedando de manifiesto una vez más que "la minería no le falla a Chile".
Sin embargo, para alcanzar lo anterior deben confluir una serie de factores, como por ejemplo un trabajo constante y directo con los actores del sector como el que ha desarrollado el gobierno del Presidente Sebastián Piñera para continuar posicionando a la minería nacional como motor de crecimiento del país y progreso de sus familias.
En este sentido en lo que a pequeña minería se trata, hemos impulsado la entrega de recursos PAMMA y FNDR para apoyar las labores de los productores de menor escala como también la realización de los directorios de Enami en regiones con el fin de potenciar en terreno el diálogo con este sector.
A lo anterior, se suman la inédita suspensión del cobro del precio de sustentación por 3 meses, la instalación de cámaras de seguridad para monitorear los procesos productivos de Enami o el traspaso de pertenencias mineras por parte de las grandes compañías del sector para potenciar a los pequeños mineros. Estas y otras medidas han incidido en el aumento de 5,1% de estos productores entre junio y agosto de este año en Atacama.
Por otra parte, si bien estamos conscientes que el desempleo en la región ha permanecido en una condición que no nos gusta, seguimos redoblando esfuerzos como los ya mencionados para continuar en la senda del crecimiento, pues estamos conscientes que la minería de esta región no sólo aporta un 97% de las exportaciones de Atacama, sino que también destaca por su uso intensivo en mano de obra y de proveedores locales.