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El "Objetivo general" de Yanko González

En resumen

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-Correctores, lentes relojes. ¿Por qué elegiste esos elementos visuales para "Torpedos"?

-La poesía es como asaltar un banco, la idea es entrar, dar una voz, hacerse con el botín y salir corriendo. Me ha interesado desde siempre la poesía oral y performática, la que está condenada al movimiento. En el caso de "Torpedos" tiene que ver con el hastío de algunos deberes culturales, como memorizar, enseñar y cumplir sistemáticamente expectativas y objetivos, tal como se da en muchos espacios educativos formales.

-¿Por qué esta antología se llama "Objetivo General?

-Escribiendo "Torpedos" llegué a una clave de lectura, a un trance. Así le di título a esta suerte de obra reunida que es "Objetivo General". Obviamente, y más allá del guiño malévolo a Neruda, es una auto burla en la medida que tras ese aparatoso y tecnocrático título, hay una enclenque evidencia. Así, por su revés, el título es una renuncia a cantar por boca de otros. "Objetivo General" trata fundamentalmente sobre el fracaso, de esa manera si el libro no se lee o no vende, será un éxito.

-¿Cómo percibes la poesía chilena?

-Como un tumor ignorado, la poesía chilena avanza como si nada y como siempre. Es decir, se multiplican los poetas y agonizan los lectores. Nada nuevo. Quizás la vieja novedad es ver muchachos cultivando formas poéticas cerradas, el soneto, la décima. Virtuosismo puro. Claro, los reparos vendrán por cierta jactancia del sonetista que quiere hacer el jaque mate en 14 jugadas. El lector ruega para que el poema se rinda, tire su rey y le arruine al poeta la condena de ser prisionero de su talento.

Yanko González es doctor en antropología y académico de la U. Austral.

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Signe Klöpper

Vagabundos contra Disney

Tras un inadvertido paso por la televisión se estrena la película animada "Homeless", producida por Fábula, protagonizada por un grupo de mendigos y repleta de críticas a los tiempos que vivimos.
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La serie animada "Homeless" sorprendió a los pocos televidentes que pudieron descubrirla en La Red en el año 2015. El horario era poco transitado: los domingos a la medianoche. Pero probablemente no había otro para una producción demasiado adulta para las franjas matutinas de animación infantil y demasiado negra para las aspiraciones masivas del prime.

Con el apoyo de los hermanos Pablo y Juan de Dios Larraín, de Fábula, la producción ahora renace como largometraje para ofrecer un cóctel de amargura, crueldad, escatología, humor absurdo y crítica social en el propicio contexto de las penumbras que propicia el cine. Está de más decir que no es común ver animación chilena en salas, menos una que acoge la sátira mordaz e incorrecta para retratar a los personajes de una ciudad que podría ser fácilmente Santiago. Digamos que si en sus afanes de exportación (basta con ver el título en inglés) "Homeless" reduce las analogías directas a Chile, sí se empeña en retratar el estado de nuestros tiempos, cuando la realidad pareciera superar a toda ficción. Vemos, de hecho, a Donald Trump, Angela Merkel y Vladimir Putin tratando de resolver una crisis de alto vuelto: la desaparición de todo el dinero virtual del planeta, fechoría perpetrada por un enemigo no exento de actualidad. Se trata de Waldo Alegría, fundador de un imperio de entretenimiento infantil que obviamente remite a Walt Disney y su expansión global (recordamos que la compañía es actualmente dueña de Lucasfilms, Marvel, Pixar y Fox).

Los héroes son un grupo de vagabundos (los personajes protagónicos: un inválido, un homosexual estrafalario, un líder anti-sistema y un enfermo de gonorrea) que comienzan a ser protegidos por un niño albino, hijo de un empresario de bronceadores, quien comienza a cuestionar el ambiente privilegiado en el que creció.

Las referencias sociales, políticas y culturales no atentan en contra de una aventura construida sobre algunos lugares comunes y que incluye hackers, robots, villanos y una comunidad de hippies fumones que contribuyen al delirio de la apuesta. "Homeless" -codirigida por Jorge Campusano, José Ignacio Navarro y Santiago O'Ryan- se sabotea también a sí misma mediante el sano ejercicio de no tomarse demasiado en serio. Detrás de esa liviandad irreverente se esconde, sin embargo, el venenoso cóctel que el mundo de hoy probablemente se merece.

en la sátira animada "homeless" los héroes son un grupo de vagabundos que son protegidos por un niño albino, hijo de un empresario de bronceadores.


en resumen

"Homeless" es una película animada satírica dirigida por Jorge Campusano, José Ignacio Navarro y Santiago O'Ryan. Es coproducida por las productoras Lunes y Fábula, de los hermanos Larraín.

Por Andrés Nazarala R

fábula