Festival del Pisco reúne a más de seis mil personas
Una verdadera fiesta de identidad, tradición y cultura se vivió hace pocos días en el Vivero Municipal de Vallenar, luego de dar vida a la cuarta versión del Festival del Pisco del Valle del Huasco. La instancia congregó a más de seis mil personas en una jornada llena de música, sabores, historia y patrimonio.
Impulsado por la Municipalidad de Vallenar y desarrollado en colaboración con diversos organismos públicos y privados, el festival se ha consolidado como una iniciativa clave para fortalecer el sentido de pertenencia, fomentar el turismo y visibilizar el valor del patrimonio cultural y productivo de la comuna.
Organización
El administrador municipal Gonzalo Cortés, en calidad de alcalde subrogante, señaló que "destaco la organización, la alianza con el sector privado y otros organismos, ya que el resultado de estas actividades es realmente positivo. Son eventos muy bonitos, bien organizados. Como equipo municipal, estamos muy contentos de haber sacado adelante esta cuarta versión".
El evento ofreció una amplia variedad de actividades que pusieron en valor la riqueza cultural de la zona. La música en vivo fue protagonista con la presentación de destacadas agrupaciones artísticas, culturales y folclóricas, que animaron al público durante toda la jornada. Los Bestones, Jilapacha, Astronautiko y Koky y su Banda Tropical Ranchera fueron algunos de los artistas que se encargaron de hacer vibrar el escenario, cerrando con gran éxito esta cuarta edición del festival.
Por su parte, el concejal de Vallenar, Roberto Tapia, expresó que "es una tremenda actividad, organizada por el área de Fomento Productivo y, por supuesto, liderada por nuestro alcalde Víctor Isla. Como concejales, siempre estaremos disponibles para apoyar esta y otras iniciativas que promuevan la cultura y el desarrollo", afirmó el edil.
Además de la música, los asistentes pudieron disfrutar de una muestra gastronómica con sabores típicos del valle, productos locales, artesanía y emprendimientos que dieron vida a un colorido y diverso espacio de encuentro comunitario. }
El festival también abrió paso para el tradicional concurso de cócteles con pisco y una cata patrimonial, donde no solo se degustaron distintas variedades, sino que también se compartió la historia y los saberes que envuelven la producción pisquera en el Huasco.