Correo
Papa Francisco
La partida del Papa Francisco, no solo nos permite aquilatar su legado espiritual, sino valorar el enorme aporte que pueden hacer las tradiciones religiosas al debate público. A veces, se cree que las religiones deben abstenerse de pronunciarse sobre temas contingentes y limitarse a sus espacios privados.
Pero, como lo señala Habermas en su famoso debate con Ratzinger en Ratisbona, las distintas tradiciones tienen mucho que aportar en el enriquecimiento de los fundamentos del Estado Democrático de Derecho. La tradición liberal hunde sus raíces en valores cristianos muy esenciales, tales como el respeto a la dignidad humana, la igualdad esencial de los seres humanos, la libertad, la protección de los más débiles, etc.
Una esfera pública que no se alimentará de las formas de vida enraizadas en ricas tradiciones espirituales, filosóficas, culturales, se vería seriamente empobrecida, pues, en definitiva, eso que llamamos lo público, no se nutre de sí mismo, sino de convicciones que han madurado durante siglos y que habitan en la pluralidad de las formas de vida.
Las sociedades tenemos que ser receptivas a lo que dichas tradiciones pueden aportar y los distintos grupos tienen el desafío de dar argumentos que vayan más allá de sus creencias, haciendo inteligibles sus contenidos para el conjunto de la sociedad. Es lo que se llama el desafío de la traducción: ser capaces de defender los puntos de vista en un lenguaje que haga sentido para quienes no comparten las creencias particulares.
En estos tiempos, donde valores esenciales se ven seriamente amenazados por, entre otros fenómenos, el poco respeto por los migrantes, el debilitamiento de las reglas internacionales o la pérdida de la confianza en la democracia, viene bien valorar el aporte que tradiciones vivas pueden hacer a los valores que han sustentado nuestra convivencia nacional y mundial.
Dr. Sebastián Kaufmann, abogado y académico U.Central
Papa Francisco II
El fallecimiento del Papa ha traído conmoción global, pero también, curiosamente, un respiro providencial para la candidatura presidencial de Evelyn Matthei. Con los focos mediáticos puestos en Roma, el equipo de la ex alcaldesa agradece esta tregua inesperada.
En Chile Vamos deben estar orando no por un sucesor inmediato, sino por un cónclave extenso, reflexivo, que les regale tiempo para ordenar vocerías, ajustar calendarios y replantear la estrategia rumbo a noviembre. Cada día sin exposición es un día ganado para una candidatura que venía corriendo con los cordones desatados.
El duelo papal se transforma así en una pausa divina, en la última milla de una carrera que exige algo más que carisma: necesita estructura, relato y coordinación. Que los cardenales se tomen todo el tiempo que necesiten. En política, como en el Vaticano, a veces la salvación llega por caminos inesperados.
Rodrigo Durán Guzmán
Papa Francisco III
El año 374 en Milán (Italia), ante la muerte del obispo Ausencio, se sugiere una elección democrática entre los aspirantes a sucederlo; pero, en la Catedral, ocurren disturbios, entre las barras de los distintos candidatos. Enérgicamente interviene la policía, al mando del prefecto, que es católico sin estar bautizado, el cual, indignado por los hechos de división entre hermanos, sube al púlpito y, desde allí, hace un fervoroso y elocuente llamado de paz, e invita a que elijan como nuevo obispo a quien esté "al servicio del Pueblo de Dios, y no a la búsqueda de riquezas, honor y poder". Una persona grita: ¡entonces que seas tú nuestro obispo!, y toda la asamblea lo aclama como tal. Dentro de una semana es bautizado, lo ordenan sacerdote y obispo: fue el gran San Ambrosio de Milán (7-12-374). En Chile, pocas autoridades religiosas confeccionan ternas para designación de obispos y, al no considerarse la opinión de los feligreses o el "Pueblo de Dios", la elección es en dedocracia (a dedo). La película "Cónclave" detalla el ambiente al interior de vaticano antes de elegir al sumo pontífice. Ahora, con la muerte del papa Francisco, serán los cardenales quienes elijan al nuevo líder de la iglesia católica.
Derico Cofré
Egolatría
El ególatra, tiene un alto culto, veneración o admiración exagerada de sí mismo y muestra complacencia en la contemplación de sus capacidades y sus actos, aunque estos sean ficticios.
"La egolatría, es un problema importante en lo que respecta a las relaciones sociales, ya que las personas de estas características, por lo general tienen complicaciones para mantener vínculos normales con otras personas. La permanente consideración de creerse seres superiores les hace ver a los demás como inútiles y reemplazables. Debido a lo mismo nadie tolera a individuos con personalidades de ese tipo, por ser conflictivos, envidiosos, caprichosos y chocantes".
Lamentablemente , donde quiera que estemos o vayamos, siempre nos encontraremos con uno de ellos .¡ Si no me cree, mire su entorno¡
Jorge Valenzuela Araya
Bono por año cotizado
El bono por año cotizado es un buen beneficio que trae consigo la reforma previsional aprobada este año, pero que recién entrará en vigencia en enero del año 2026, por lo que aún queda mucho tiempo para que los pensionados reciban ese dinero.
En lo concreto, tendrán derecho a 0,1 UF por año cotizado, con un tope de 2,5 UF -25 años cotizados-, las mujeres con un mínimo de 10 años cotizados, y los hombres con un mínimo de 20 años cotizados, por lo que finalmente se busca premiar el esfuerzo previsional durante la vida laboral.
Si bien es un buen beneficio, debe revisarse la forma de financiarlo, pues el financiamiento vendrá desde el préstamo del trabajador a partir de la cotización adicional, a pesar que muchos expertos sostienen que debe financiarse desde impuestos generales, pero es un tema que perfectamente puede ser revisado y modificado en el próximo periodo presidencial.
El bono por año cotizado es un avance en materia previsional, que debe perfeccionarse, pero que va en la línea correcta.
Eduardo Jerez Sanhueza