Secciones

  • Portada
  • Actualidad general
  • Opinión
  • Actualidad general
  • Clasificados
  • Servicios
  • Deportes
  • Espectáculos
  • Contraportada

Claudio Mirada impulsa el tema de los Derechos Humanos dentro de la labor de Carabineros.

E-mail Compartir

El cabo 1°Claudio Ignacio Miranda Miño recuerda que para ingresar a Carabineros estuvo inspirado en la vocación de servir a lo demás y fue producto de ello que llegó al tema de los Derechos Humanos.

En la actualidad, pertenece a la sección de DD.HH Atacama, pero primero la institución lo capacitó y entregó conocimientos sobre responsabilidad de Carabineros ante la ciudadanía y de quienes pertenecen a sus filas.

Para Miranda, los DH.HH. son un deber ineludible y transversal a todas las acciones de la policía uniformada, ya que entrelaza la protección de la vida y dignidad humana.

"Por diversas razones por una porción importante de los ciudadanos es difícil reconocer que implica el respeto a los Derechos Humanos, desconociendo y minimizando su valor. Esto me motiva a seguir trabajando constantemente, toda vez que Carabineros adoptó este enfoque en la aplicación de sus funciones policiales, producto de su modernización", dijo.

Agregó que "también existe la necesidad de responder a mayores exigencias del sistema democrático. Siento que cumplo una función silenciosa, pero no menos importante, ya que requiere de estudios constantes para poder externalizarlo a mis compañeros en la función policial".

Sus mayores logros fueron durante estos dos últimos años. Recibió la certificación de instructor en DD.HH., debido a la alianza que mantiene Carabineros y el Comité Internacional de la Cruz Roja. Posteriormente, recibió el reconocimiento por sus acciones destacadas en la promoción DD.HH desde el alto mando de la policía uniformada.

En el ámbito operativo, cuenta con más de una felicitación, donde destaca la primera intervención en un funeral de alto riesgo en Copiapó, con una gran cantidad de armas de fuego y detenidos.

Este uniformado es destacado por desplegar iniciativas propias más allá de la labor operativa, realizando un trabajo de ayuda y sensibilización con la comunidad, entregando ayuda y orientación a las personas vulnerables. Actualmente, Miranda gestiona un diplomado con la Universidad de Atacama en materias de DD.HH. para efectivos de la Región de Atacama.

Agregó que quiere ser un aporte para la región: "Me gustaría generar un impacto positivo y duradero en la vida de las personas y comunidades en su relación con Carabineros, inspirando un futuro más sostenible para la región en el marco de los Derechos Humanos".

"Es importante lograr los sueños, no importa lo difícil que parezca, no hay que rendirse. La perseverancia y la determinación son clave para alcanzar el éxito. Aprender de los errores y aciertos", comentó.

Asimismo, el cabo 1° destacó que "no hay que tener miedo a fallar, porque es en esos momento cuando más se crece. Hay que mantener una mente abierta y curiosa. Aprender de los demás y compartir los conocimientos. Nunca perder la humildad, la empatía y tratar a los demás con respeto", sentenció.

Javiera Tapia presentó concierto en Italia con canciones -poemas de Gabriela Mistral.

E-mail Compartir

Desde pequeña, la música formó parte de su vida. Javiera Tapia recuerda los viajes hacia Taltal, escuchando el ballet Cascanueces o los discos CDs de ópera que oía en su casa cuando tenía apenas seis años.

Esto despertó en la joven una fascinación por el poder de la voz y la interpretación. Así, con solo ocho años empezó a estudiar piano, violoncello y violín.

Luego fue en su adolescencia cuando descubrió su habilidad vocal, lo que rápidamente estuvo respaldada por lecciones en Santiago. Ahí, descubrió que el canto lírico, podía ser más que una pasión: era un camino para expresar su identidad, sus raíces y emociones.

Al respecto, Javiera Tapia comentó: "decidí estudiar canto lírico en la Universidad de Chile y posteriormente en la Escuela Moderna de Música, donde me titulé con distinción máxima unánime".

Agregó que "ya en el extranjero y con un firme compromiso por la música chilena, decidí explorar y rescatar parte del patrimonio musical de Chile. Esto a través de mi investigación sobre el inicio de la ópera y el compositor y fundador de la ópera chilena, Eleodoro Ortiz de Zárate".

Es que la obra de compositores chilenos como Eleodoro Ortiz, por ejemplo, representa una historia patrimonial muchas veces olvidada, y "siento que tengo una responsabilidad en traerla a la luz".

También la inspira profundamente la figura de la poetisa Gabriela Mistral y su amor por Chile. "Cuando descubrí un ciclo de canciones (1926) basado en manuscritos de sus poemas para el libro Ternura en 2022, sentí una conexión especial y un impulso por compartir esa obra con el mundo".

Además, "me impulsa la creencia de que la música tiene el poder de unir a las personas, de crear un sentido de pertenencia, y de ayudar a quienes quizás no han tenido acceso a la cultura y al arte", puntualizó.

Su mayor logro ha sido rescatar parte del patrimonio musical y tener la fortuna de poder cantarlo. Uno de los logros que más atesora es haber presentado el ciclo de canciones de Ternura, musicalizados por Eleodoro Ortiz en el Festival Dalle Alpi alle Ande, realizado en Como, Italia, en agosto pasado.

Además, su trabajo en el documental "De la partitura a la voz" permitió contar un poco de la historia de la música docta chilena en un formato que llegará a muchas personas, tanto en Chile como en el extranjero.

Su calidad vocal fue reconocida en distintos escenarios nacionales, Italia, Alemania y Estados Unidos. Sin embargo, siente que su momento más importante es el actual: poner su canto a disposición de forma gratuita a su gente, con un profundo sentido de descentralización de la cultura.

Realizará una serie de conciertos gratuitos en Atacama. Su presentación en Diego de Almagro estará acompañada por el piano municipal que con el apoyo de la minera Gold Fiels, está en proceso de restauración en manos de Romero Pianos.