Correo
Enami
Señor director:
La empresa Nacional de Minería, Enami, ha entregado un servicio a la mediana y pequeña empresa minera en los últimos 60 años, que ha permitido desarrollar proyectos mineros que por sí solos no son posibles de explotar. Pero que las agencias de compra reciben sin limitaciones.
Esta condición ha ido creciendo por influencia de un buen precio del cobre, oro y plata en los mercados internacionales y por avances en la tecnología de extracción de metales.
Sin embargo, en mi opinión falta mucho por hacer para lograr que los posibles proyectos se desarrollen a corto plazo. Un camino sería ampliar la capacidad de las actuales plantas y fundiciones para minerales.
Hay registradas mas de mil pequeñas propiedades mineras, que por falta de empresarios, financiamiento, laboratorios, nuevas tecnologías no han sido explotados.
Un ejemplo de estas aseveraciones que la recuperación del cobre, oro y plata de leyes más bajas no son pagadas al precio internacional. A modo de fundamentación, los minerales que explota Codelco tienen molibdeno y la empresa lo recupera en todas sus plantas, pero Enami no recupera nada de este mineral.
Recuperar Molibdeno y otras pastas, sería parte de la modernización de Enami, así como también la ampliación de los actuales planteles cuidando las medidas medio ambientales para evitar contaminación con tranques de relave.
Muchas variantes se han estudiado para modernizar Enami, pero el tiempo ha pasado y son más los ejecutivos mediocres que no han obtenido resultados positivos, ya que en estos más de 60 años, Enami debería ser la empresa que más aportes le haga al Estado. Hoy es la tercera empresa de exportación más grande en el país y con los cambios esperamos que crezca en los negocios mineros con otras empresas extranjeras que se avecinen en Chile.
Debo señalar que las operaciones que realiza Enami para procesar los minerales cobra valores muy altos y que con un reestudio deberían bajar ostensiblemente como son el padrón de flotación, padrón de fundición y gastos generales.
Espero una reacción de Enami ya que la pequeña minería no puede esperar mucho tiempo más.
Carlos Alfredo Vilches Guzmán, ex diputado por Atacama
Balmaceda y el cine
Señor director:
El segundo año de la década del 70, el Departamento de Cine de la Universidad Técnica del Estado, solicitó al Taller de Cine Calibre 16 de la Universidad del Norte, como productor en Antofagasta de lo que podría haber sido una de las experiencias más señeras del cine nacional, la realización del largometraje BALMACEDA, que dirigiría el documentalista Fernando Balmaceda, en su primer argumental.
El encabezamiento es casi textual de la obra inédita EL NORTE DEL CINE (Osman Cortés Argandoña: Lo que se hizo en cine en el Norte de Chile y el Norte que debería tener el cine chileno).
El taller creado por Manuel Vega Olivares (+) y Osman Cortés Argandoña, entonces estudiantes de Periodismo, con avisos en El Mercurio, convocó a la comunidad para postular a desempeñar roles secundarios en el tema de las causas y efectos de la revolución de 1891. La personificación de Balmaceda la acometería el arquitecto Nemesio Antúnez.
Fernando Balmaceda nos envió el guión del filme y, para afinar la configuración histórica, le consultamos al historiador Oscar Bermúdez Miral, quien ubicó inexactitudes como la vestimenta de los obreros salitreros en un enfrentamiento con el ejército en las calles Balmaceda con Bolívar, en Antofagasta.
Cuando los trabajadores del salitre llegaban a la ciudad lo hacían vestidos con terno oscuro, camisa blanca y un sombre tipo pajizo. No como los mostraba el guión: camisa abierta al pecho, pantalones a media pierna y con un puño en alto.
La escena con las camisas abiertas era visualmente acertada, pero no cumplía con la realidad histórica. El guión debió ser revisado lo que detuvo la producción que iba a ser financiado con recursos estatales empleando la infraestructura de Soquimich, que después del golpe de estado, fue traspasada a Julio Ponce Lerou.
Los recursos para el filme fueron discutidos entre los partidos de la Unidad Popular, cuyos dirigentes dudaban en dedicar dineros estatales en dos películas de costosa producción, Balmaceda y Manuel Rodríguez, como lo asegura en su obra PLANO SECUENCIA DE LA MEMORIA DE CHILE, Jacqueline Mouesca, investigadora del cine chileno.
En 1994 nos encontramos con Fernando Balmaceda en Copiapó, pero poco recordaba del cuestionamiento de Oscar Bermúdez a su guión para su frustrada película.
Osman Cortés Argandoña
Educación en Atacama... ¿Y qué pasó con el modelo finlandés?
Señor director:
A propósito del conflicto de la educación en la Región de Atacama, con dos meses sin clases, el presidente del Colegio de Profesores de Atacama, Carlos Rodríguez declaró...
"El ministerio de Educación está confundido, porque cree que es una negociación y no, lo que tiene que cumplir son sus obligaciones"
Considerando que los profesores de Atacama, solicitan que haya reparación de las duchas, vidrios de las ventanas, lavamanos, luminarias adecuadas en las salas de clases, enchufes e interruptores en buenas condiciones y que se disponga de materiales e insumos necesarios para el funcionamiento de las escuelas y de los liceos, cocinas con aprobación sanitarias, etcétera, no hay que ser un experto, para concluir que, la solución no va por una "NEGOCIACIÓN", sino más bien, por el "CUMPLIMIENTO DE LAS OBLIGACIONES" del ministerio respectivo, mínimas, para mantener estos elementos en excelente estado para ser usados por alumnos y profesores...
Reflexión: Revisando las exigencias del profesorado en conflicto (tazas de baño, duchas, enchufes, etcétera), hace recordar, que no hace mucho tiempo, estaba el sueño de que nuestra educación, se asemejara a la Finlandesa, pues bien, lo que ocurre hoy en Atacama, solo demuestra que el "sueño finlandés", quedo solo en eso, un sueño, porque lo que les ocurre hoy a los profesores y alumnos de Atacama, más se parece a una "pesadilla de irresolución típica a la chilena"arketing por la contingencia.
Luis Soler