El desafío de rescatar la historia y legado del pueblo chango
PATRIMONIO. Es bisnieta del 'Chango Robe', el último constructor de balsas de cuero de lobo marino. Así, su familia marcó su vocación por preservar el patrimonio del pueblo costero.
El legado histórico de los pueblos originarios es un tesoro, cuyas tradiciones van pasando de generación en generación. A través del boca a boca sus historias van quedando en Atacama.
Es una lucha constante de quienes buscan que sus antepasados no desaparezcan, sino más bien relevar y poner en valor el patrimonio cultural existente en la región.
En caleta Chañaral de Aceituno, una mujer día a día despierta para ir al rescate de sus tradiciones y no permitir que la historia y el aporte del último pueblo originario reconocido en el país desaparezca: los changos.
Ivana Guerra Marín es educadora diferencial y operadora turística. Ella guarda un legado que, según sus palabras, depende de su responsabilidad y compromiso el mantener vivo.
Ivana es bisnieta del último constructor de balsas de cuero de lobo marino del pueblo chango, el "Chango Robe". En su labor como operadora turística prevalece el relato sobre la presencia histórica y el reconocimiento legal del pueblo costero.
"Me siento orgullosa de mi sangre, de mi pueblo y ancestros. Por lo que, tras todo este tiempo dedicado al rescate de las tradiciones, además de transmitir y compartir la historia del pueblo chango con los turistas y lugareños, estoy segura que es un granito de arena súper valioso para la historia de Atacama", declaró.
En este sentido, quienes la conocen destacan en ella su enfoque y su vocación en revitalizar la cultura de sus ancestros. Su labor no es en vano.
"Trashumantes, de tierra y mar" es una pieza audiovisual realizada este año en el Museo Histórico Gabriel González Videla. Aborda la presencia histórica y reconocimiento legal del pueblo chango y a quien ha sido identificado como el último constructor de balsas de cuero de lobo marino, el "Chango Robe". Este archivo es posible disfrutar en distintas plataformas, entre ellas Youtube.
En plano profesional, a pesar de las brechas geográficas ejerce su profesión como educadora diferencial, aportando a que niños y niñas del territorio puedan alcanzar sus objetivos educativos y apoyándolos y alentándolos.
"La educación es primordial para un mejor futuro. El poder aportar para que los pequeños de la caleta, como también de las zonas aledañas, puedan superarse día a día para mí es algo invaluable, que me llena el alma. La mirada de un niño agradecido es suficiente para erizarte los pelos y sentir que todo lo que realizado es lo correcto", comentó
De manera autodidacta se formó como operadora turística, poniendo en valor las rutas ancestrales de la mano del emprendimiento turístico "Chango Robe".
Un relato transgeneracional de la extinción de una forma de vida y la importancia de mantener viva la memoria de un pueblo protector de la vida, en cuanto a una coexistencia respetuosa con la naturaleza y al medio ambiente. Estos elementos son clave para representar el valor y aporte de una mujer a la historia de Atacama y del pueblo chango.