Secciones

  • Portada
  • Actualidad general
  • Opinión
  • Actualidad general
  • Deportes
  • Clasificados
  • Servicios
  • Cartelera y Tv
  • Espectáculos
  • Contraportada

Resultados de índice de soporte a la infraestructura a escala provincial plantearon diversos desafíos al mundo público y privado

ESTUDIO. El ISIT de la Región de Atacama fue presentado en la X Semana de la Construcción en su segunda jornada con gran convocatoria.
E-mail Compartir

Con una gran convocatoria de actores públicos y privados, se llevó a cabo ayer viernes la segunda jornada de la X Semana de la Construcción Atacama, instancia donde el doctor en geografía humana, magíster en desarrollo urbano de la Pontificia Universidad Católica y jefe del proyecto ISIT, Arturo Orellana, expuso los resultados del Índice de Soporte a la Infraestructura Territorial (ISIT) de la Región de Atacama.

Un índice que se aplica a escala provincial, en este caso en Chañaral, Copiapó y Huasco, con el fin de identificar el nivel de desarrollo de la infraestructura en los territorios y así determinar su aptitud para localizar actividades económicas y productivas.

"La radiografía que propone el ISIT es poder dotar a las regiones particularmente de un conocimiento mayor y con una base robusta de datos respecto a los desafíos que tiene en materia de infraestructura en todas sus dimensiones, agua, energía, telecomunicaciones, vialidad, resiliencia y logística. Y particularmente en el caso de Atacama pudimos verlo a partir de las tres provincias, viendo que en algunas áreas pueden estar con una mejor dotación de infraestructura, pero en otras claramente presenta déficit importante que se acentúan fundamentalmente en la provincia de Chañaral", explicó Orellana.

Un insumo de gran relevancia que tiene como propósito aportar criterios técnicos para poder alinear la asignación de la inversión local en infraestructura con los objetivos de desarrollo productivo y que así puedan materializarse, convirtiéndose en una carta de navegación, tanto para el sector público, como el privado.

Asimismo, mejora el proceso de toma de decisiones y la inversión pública, permite ayudar a los territorios a dotarse de la infraestructura pública que requieren, atraer inversiones priorizadas de acuerdo a la realidad local, impulsa el crecimiento económico y favorece el desarrollo equitativo de todo el país, lo que permite aumentar las condiciones y calidad de vida de las personas y las comunidades, a través de un desarrollo sostenible.

Resultados

El ISIT actualmente se elabora calculando 6 dimensiones que son agua, energía, telecomunicaciones, vialidad, logística y resiliencia, cada una con diversos indicadores relativos a las condiciones geográficas y climáticas de cada provincia.

Por lo mismo, de acuerdo a los diferentes indicadores, los resultados podían tener cuatro interpretaciones, alta, media-alta, media-baja y baja, ya sea a escala provincial, como a nivel macrozonal, que comprende desde la Región de Arica y Parinacota hasta la Región de Coquimbo.

En ese sentido, las tres provincias de Atacama presentaron un índice medio-bajo en cuanto a la disponibilidad de agua, siendo las más bajas de toda la macro zona norte. No así en materia de energía, donde presentaron un nivel medio-alto.

En cuando a la dimensión de telecomunicaciones, las tres provincias tuvieron diferentes resultados, ya que Chañaral tuvo un nivel bajo, Copiapó alto y Huasco medio-bajo. Respecto a vialidad, Chañaral y Copiapó resultaron bajas y Huasco medio-baja. En logística, Huasco se mostró media-alta, mientras que Chañaral y Copiapó media-baja.

Finalmente, en cuanto a la dimensión resiliencia, las provincias de Huasco y Chañaral tuvieron un bajo resultado y Copiapó media-baja.

De esa forma, las principales observaciones del estudio sugieren que existen "condiciones más bien deficitarias en la dimensión agua, producto de una escasa superficie urbana sujeta a concesión sanitaria y una baja cobertura de territorios operacionales, sumado a un severo déficit de lluvias anuales".

Asimismo, el ISIT establece que "se observan condiciones más bien favorables en energía, en que una más bien baja generación de potencia energética, es compensada por el número de subestaciones eléctricas existentes y el gran potencial en la generación de energías renovables".

Respecto a las otras dimensiones indicó que vialidad y resiliencia estaban más deficientes.

"En el caso de la dimensión de vialidad, se explica por el menor porcentaje de red pavimentada de doble calzada, y la menor red pavimentada y total, relativa a la superficie operacional. En el caso de la dimensión de resiliencia, se explica principalmente por la mayor recurrencia de desastres".

Resultados poco alentadores que demuestran el gran trabajo y desafío que tiene la región en general en diversos ámbitos y que son un gran elemento con el que las autoridades pueden trabajar para poder enfatizar aquellas áreas más complejas.

"Creo que donde se manifiestan mayores preocupaciones tiene que ver en temas de vialidad y telecomunicaciones, que básicamente está asociado a la interconectividad de los centros urbanos, los pequeños centros urbanos. Eso de alguna manera tiene un efecto de no abordarse en el corto o mediano plazo, problemas importantes como despoblamiento, abandono de actividades, falta de interés. Desde ese punto de vista creo que eso es importante relevarlo y por otro lado, el tema logístico. Sabemos que los equipamientos que están asociados, por ejemplo, a dotación de seguridad, carabineros, bomberos, oficinas de correo, etcétera, proximidades, conectividad, de transporte, no son homogéneas en toda la región. Tienden a favorecer a las ciudades más grandes y sobre eso creo que hay un desafío importante", concluyó Orellana.