Una latente preocupación ha manifestado un grupo de padres y apoderados por las situaciones de inseguridad que se han generado en los recintos educacionales, afectando la participación escolar de sus hijos, en especial, a partir de enseñanza media.
Para identificar qué problemas son los acuciantes podemos tomar como ejemplo lo que nos muestra la prensa: porte de armas, consumo y venta de drogas, riñas y hasta agresiones a docentes, sin embargo, hay que reconocer que no todos los problemas afectan a las comunas por igual a pesar de que las dificultades son transversales y urgentes.
Primero medio es un nivel crítico, es el que presenta la mayor repitencia del sistema educativo, siendo el sector público y municipal los que evidencian los más altos índices, pero también el que presenta la mayor deserción escolar.
El consumo de drogas y microtráfico se han instalado como problemas latentes, con algunos padres que han permitido el uso recreacional pero que no identifican las vías ni las actividades con grupos de pares para conseguirla.
Una dificultad reiterativa se evidencia con las familias desvinculadas con lo que les ocurre a sus hijos en el proceso escolar frente a las situaciones conflictivas, sin mostrar adherencia a las intervenciones de la red externa existente.
Protocolos y sanciones aplicables al interior del establecimiento educacional con foco formativo, para algunos padres excesivamente débiles, frente a acciones que presentan características delictuales, considerando que lo punitivo, sobre los 14 años, corresponde a instancias externas mediante denuncia y evidencia.
Nunca está de más recordar que una comunidad escolar siempre va a permear lo que ocurre en la sociedad y por lo mismo el trabajo para abordarlo necesitará que las instituciones involucradas se articulen y trabajen en identificar soluciones, algo desafiante, más al asumir que se trabaja con la etapa adolescente.
Crisis de pánico, rasgos depresivos, autolesiones o consumo problemático de sustancias están asociadas a salud mental, afectando el desarrollo de los aprendizajes de manera directa.
El plan de reactivación educativa impulsada por el Mineduc incorpora como uno de sus ejes la salud mental y convivencia escolar desplegando una serie de acciones de apoyo, detección y formación inédito, que deberá ser evaluado próximamente como una herramienta concreta para enfrentar los problemas que hoy están afectando a los estudiantes.