Correo
Paridad antidemocrática
Señor director:
La consejera electa Ivón Guerra declaró: "Si la izquierda insiste en el Consejo con la paridad, voy a decir que es antidemocrática".
Comparto tal aserto porque la paridad de salida atenta gravemente contra la igualdad ante la ley (artículo 19, 2º CPR: "Hombres (varones debió decir) y mujeres son iguales ante la ley), contra el principio democrático "una persona-un voto" y porque "le mete la mano a la urna". La preparación, la inteligencia y las capacidades personales son independientes del sexo.
Adolfo Paúl Latorre, abogado y Magíster en ciencia política
El futuro rural de nuestro país
Hemos visto los últimos días como la disputa judicial sobre la subdivisión de predios rústicos que el Gobierno está llevando contra un recurso de protección claramente mal interpuesto acapara las miradas, mientras que el verdadero tema de fondo se sigue evitando, y las promesas de un nuevo proyecto de ley que regule esta materia y permita la habitabilidad rural aún no llegan.
Si queremos frenar la parcelación desmedida, evitar los procesos judiciales innecesarios y, a la vez, fomentar la descentralización, necesitamos legislar de manera urgente, no olvidemos que prácticamente un 90% de la población vive en ciudades y que más del 80% de nuestro país es rural.
La vida en el campo puede traer nuevas oportunidades e instalar una economía basada en la naturaleza, en la salud y en la felicidad de las personas. Pero esto no se logrará con desarrolladores mal asesorados interponiendo recursos de protección, ni tampoco con promesas legislativas incumplidas.
Diego Varela, socio fundador de Biósfera Austral
La salud es nuestro desafío
Hoy en Chile tenemos una emergencia como no vista en décadas en el sistema de salud, que afecta prácticamente a toda la población, ya que tanto el sistema público como privado parecen estar al borde del colapso. La crisis de las Isapres no puede dejar feliz a nadie, ni siquiera a los grandes detractores del lucro. Más de tres millones de chilenos podrían quedar sin cobertura, lo que alargaría aún más las abultadas listas de espera del sector público, siendo que sólo las no GES hoy día tienen a más de 2,2 millones de chilenos esperando por una atención con un número que demora más de 400 días en tocar su turno. La quiebra del sistema también podría arrastrar a las clínicas privadas, que no solo atienden a clientes de Isapres, sino también a 5,7 millones de afiliados a FONASA.
¿Cómo superamos esta crisis? ¿Dejamos que el Estado se haga cargo? ¿Dejamos que los políticos se hagan cargo? ¿Dejamos que los privados se hagan cargo? ¿Los ciudadanos tenemos algo que aportar para resolver la crisis? Parece que la respuesta más apropiada es que todos los chilenos tenemos que hacernos cargo de esta emergencia, como todos los grandes temas públicos, partiendo por una colaboración público - privada que nos convenza y no genere recelos, poniendo el foco en las personas antes que las instituciones, da lo mismo quien aporta la solución; mientras sea eficiente y que aporte valor a todos los que están sufriendo angustia por su salud o de algún familiar.
Las Isapres tienen que poner de su parte cobrando lo justo, sin cambios arbitrarios a contratos previamente establecidos., ¿Por qué tenemos más de 300 mil reclamos ante la Superintendencia el último año?, ¿Por qué no se reajustaba en forma automática el valor de un hijo al cumplir dos años, si la información estaba a la vista en sus propios sistemas? Hace tiempo que los empresarios exitosos se dieron cuenta que ya no sirve jugar al límite, hay que ir más allá para generar un triple impacto genuino, sobre todo cuando existen clientes cautivos, que no tienen alternativa de cambiar de proveedor por pre-existencias lo que, de dejarse caer a las actuales Isapres, será definitivamente dramático porque ni una nueva Isapre ni los seguros complementarios a Fonasa que se han propuesto, se harán cargo de los pacientes que las padecen, cuestión de la cual nadie parece estar preocupándose en serio.
El Gobierno y el Congreso deben buscar la fórmula para evitar la quiebra del sistema con una solución sostenible a largo plazo para las aseguradoras privadas, donde paguen lo que corresponda, pero no a costa de su extinción. Los servicios públicos también tienen que promover más mecanismos ingeniosos de colaboración para seguir reduciendo listas de espera, atender en horarios inhábiles, profundizar la telemedicina en todos los niveles, realizar operativos médicos masivos en poblaciones vulnerables para patologías de atención ambulatoria y colaborar con organizaciones de la sociedad civil que le pueden aportar agilidad. Los médicos también tienen una parte de responsabilidad, la sanción por la entrega de licencias sin fundamento debiese ser mucho mayor en términos económicos y profesionales, el mismo Colegio Médico, en conjunto con el COMPIN, debiese ser el organismo más crítico de esta pésima práctica, que estresa artificialmente los precios de la salud en Chile y vulnera la buena fe hasta extremos intolerables, en la que los trabajadores que las solicitan también tienen su parte, al asumir que esto no tiene costo;¡claro que lo tiene! El aumento en el valor de los planes de salud así lo demuestra.
Ignacio Serrano, director ejecutivo Desafío Levantemos Chile
Líderes escolares
En el marco de la implementación de la política de reactivación educativa, es necesario que todos los establecimientos escolares del país dispongan al máximo de sus capacidades. En este contexto, el rol de los líderes resulta clave para el éxito de esta política. Al respecto, la literatura sobre liderazgo señala que una importante característica de las escuelas efectivas es la capacidad de adaptarse a un escenario externo en permanente cambio. Ahora bien, ¿cómo potenciar desde la política pública esta capacidad, a fin de lograr una efectiva reactivación de los aprendizajes? En cuanto a lo anterior, algunos estudios hablan del liderazgo sistémico como estrategia de mejora, en la que directores lideran asociaciones entre varias escuelas y adoptan el papel de líder comunitario para establecer redes o relaciones más amplias entre comunidades locales. Por otro lado, diversos estudios muestran la relación que existiría entre el liderazgo en red y la mejora escolar. Lo reseñado anteriormente muestra la importancia de fomentar prácticas de colaboración y de intercambio de experiencias que permitan a los equipos directivos retroalimentarse del trabajo de otras comunidades. Conviene mencionar que esta situación adquiere especial fuerza si se trata de la educación técnico profesional, dada la necesidad de que estos establecimientos se vinculen territorialmente y trabajen colaborativamente tanto con otras instituciones como con otros liceos. En conclusión, entender la mejora escolar como un proceso colaborativo parece ser el factor clave para lograr una efectiva reactivación de los aprendizajes.
Armando Rojas Jara, académico Facultad Educación UDD, Centro de Innovación en Liderazgo Educativo CILED