A tener paciencia con los tacos
La comunidad criticó en mayor proporción lo que fue el Súper Lunes, que marca el comienzo de días agitados en las calles de la capital regional. Como todo plan, se requieren ajustes. Esto confirma la necesidad de una vía alternativa que cruce la ciudad. La idea de una que parta de Llanos de Ollantay y conecte los sectores altos es una buena propuesta, pero de largo aliento. Se requiere avanzar.
Con una alta congestión partió esta semana el llamado "Súper Lunes", que marca el inicio de días agitados en la capital regional. El tránsito se hizo imposible en sectores que históricamente generan tacos como Copayapu, Los Carrera y los callejones lo que trajo molestia dado que se esperaba un mejor flujo producto del plan aplicado por las autoridades, que van desde los horarios diferenciados hasta la reprogramación de semáforos. Habrá que tener paciencia con este tema. Toda idea requiere de tiempo para lograr tener una mayor eficacia y es probable que se hayan registrado demasiados desajustes, que no están dando el resultado esperado.
Como primer día, la nota es roja pero ciertamente hay que esperar para tener un resultado definitivo y ello implica un análisis profundo desde las distintas partes involucradas.
Se tiene que ser lo más asertivo posible. Y es que hay muy poco espacio de movimiento, esto en relación a que prácticamente no hay vías alternativas (hay una que conecta El Palomar con el callejón Diego de Almagro) y ello significa que hay menos atajos para evitar la congestión. No olvidemos que habían opciones como la que conectaba El Palomar con Santa Elvira, pero finalmente nunca se concretó su apertura pese a que el gobernador Miguel Vargas había mencionado el año pasado que había conversaciones avanzadas.
La situación podría ser incluso más caótica. No todos los recintos educacionales entraron ayer de forma presencial dado que una buena parte de los que pertenecen a SLEP Atacama están con clases online o tienen fecha para los próximos días para presentarse en las aulas, por lo que recién en dos semanas se tendría un panorama más certero.
De esta forma, se deben sacar dos lecciones claras.
Una es que el transporte público es clave para intentar tener una armonía en las calles, pero eso está lejos de ser una realidad cuando la capital regional tiene solamente un 25% de su sistema de transporte público operativo con microbuses.
La otra es que los planes de una vía alternativa que cruce la ciudad deben dar pasos concretos. La idea de una que parta de Llanos de Ollantay y conecte los sectores altos es de largo aliento, pero necesaria para a futuro contar con un mejor tránsito.