Redacción
Fueron dos estacadas en una de sus piernas, las que ocasionaron que Jairo Cortés Rivera de 34 años quedara grave, aún cuando sangraba profusamente le pidió a su agresor que lo llevara a un centro asistencial, pero lo dejó morir.
La noche del jueves fue la última en la que se vio con vida a la víctima, en una casa en el sector entre el callejón Pedro de Valdivia y El Inca en Copiapó, en una toma de terreno. Era el inmueble de la suegra del supuesto autor del hecho, donde además vivía la víctima.
Según el relato del fiscal en la audiencia de formalización de cargos, esa noche varias personas compartieron en esa casa, donde por causas que se investigan hubo una discusión y el imputado con un elemento cortopunzante atacó a la víctima. "En esa dinámica alrededor de las 22 horas ocurrió una pelea en el lugar, ocasión en que el detenido atacó en dos oportunidades a la víctima, identificada como Jairo Cortés Rivera, con un arma cortopunzante en su pierna derecha", indicó el fiscal Pedro Pablo Orellana
Jairo según el imputado, mal herido caminó y le dijo "me cagaste" y posteriormente le pidió que lo llevara a un centro asistencial. El agresor, tomó la camioneta de la víctima y manejó hacia un sector ubicado en el callejón Bruno Pizarro, dejándolo en el asiento del copiloto.
Frente al lugar había una casa que pertenece al padre del imputado a quien este último le pidió que llevara a la víctima al hospital, quien le respondió que no quería meterse, le dijo lo mismo a su hermano apodado "Fito", quien tampoco accedió a este requerimiento. Fue así como la víctima, quien había llegado viva y consciente a este lugar le dio un shock hipovolémico que generó una falla cardiaca que le causó la muerte.
El imputado, se fue a la casa donde ocurrió el hecho, y reconoció en las diligencias que cuando dejó a la víctima en el automóvil estaba consciente y que no pensó que se moriría.
En horas de la mañana del viernes fue la cuñada del imputado la que llamó a Carabineros porque había una camioneta con alguien muerto en el asiento del copiloto. El fiscal se constituyó en el lugar y solicitó las primeras diligencias a la Brigada de Homicidios (BH) de la PDI quien al iniciar la investigación buscó aclarar por qué la llave de la camioneta estaba en la casa del padre del imputado, dilucidando esto se pudo dar con el autor del hecho.
Durante las diligencias se tomaron una serie de declaraciones que permitieron establecer la participación del imputado en el mortal ataque y en las acciones posteriores que derivaron en el fallecimiento de la víctima.
Además, habría una teoría respecto a que podría haber sucedido con anterioridad y que generó una agresión que dejó rastros de sangre en las latas de cerveza y hasta en la reja de la casa. Según la declaración de algunos testigos, la víctima habría sostenido una relación sentimental con la pareja del imputado.
Otro de los puntos que se dieron a conocer en la audiencia revela que si a la víctima le hubiesen colocado un torniquete en la pierna y hubiese sido trasladado hasta un recinto asistencial, recibiendo ayuda oportuna, podría haber sobrevivido.
Prisión preventiva
Con todos estos antecedentes, la Fiscalía formalizó la investigación por un delito consumado de homicidio, cabiéndole al imputado participación directa en este crimen, la que se sustenta además con su propia declaración. Frente a la gravedad de este delito, el fiscal Orellana solicitó al Juez de turno la medida cautelar de prisión preventiva por considerarlo un peligro para la seguridad de la sociedad.
Frente a esta solicitud y ante los antecedentes expuestos por la Fiscalía, el Tribunal accedió a la petición del fiscal y decretó la prisión preventiva del imputado, quien deberá ingresar a la cárcel de Vallenar por su seguridad donde se mantendrá privado de libertad durante el transcurso de las indagatorias de la causa.
"En esa dinámica alrededor de las 22 horas ocurrió una pelea en el lugar, ocasión en que el detenido atacó en dos oportunidades a la víctima, identificada como Jairo Cortés Rivera, con un arma cortopunzante en su pierna derecha".
Pedro Pablo Orellana, Fiscal