Correo
Niños, niñas y adolescentes
Esta semana fuimos testigos de una situación muy grave. Dos niños son captados amenazando a otros comerciantes ambulantes, seguramente cuidando su territorio de venta, con armas cortopunzantes y a vista y paciencia de una mujer, al parecer su madre, arriesgando su vida, la de los demás y abandonando su infancia muy tempranamente. Según los medios de comunicación estas personas son de origen extranjero y al igual que muchos que migran hacia Chile su única fuente de subsistencia es el comercio ambulante.
Chile está viviendo un proceso de descomposición social y de deterioro de la civilidad, las instituciones políticas no logran estar a la altura para detenerlo. En este contexto, la incapacidad institucional para cumplir con el rol de resguardo y protección a la población está afectando a niños, niñas y adolescentes. Nos estamos acostumbrando a leer y escuchar en las noticias sobre la participación de niños en actos delictivos, algunos de ellos terminan cometiendo graves delitos, incluso asesinando y otros son muertos en el marco de procedimientos policiales donde se produce intercambio de disparos con armas de fuego.
Hace unos días se tuvo conocimiento de la noticia que más de 50 mil estudiantes abandonaron el sistema escolar entre el año 2021 y 2022. Según el Centro de Estudios del Ministerio de Educación, se han detectado más de 1.230.000 niños que si bien no han abandonado el sistema escolar presentan asistencias graves, este número corresponde al preocupante 39% de la matrícula.
En todo este contexto, la migración irregular, está generando un gravísimo escenario para la efectiva protección de niños, niñas y adolescentes que están llegando a Chile. La migración irregular impide visibilizar a las personas que habitan nuestro territorio, al producirse esto, los niños, niñas y adolescentes que entran al país en estas condiciones quedan expuestos a abusos y violación de sus derechos. El Estado tiene un deber esencial de estar al servicio de la persona humana, de dar protección a la población y a las familias, resguardar los derechos de las personas y hoy no está siendo efectivo en el cumplimiento.
Si bien son muchos los problemas que aquejan a la sociedad chilena no es posible desconocer que la migración irregular desatada es una de las mayores preocupaciones de la ciudadanía, sino se toman medidas eficaces pronto para regularizar este tipo de migración la crisis social seguirá agudizándose, generando un mayor grado de resistencia en la población lo que se puede traducir en discriminaciones, abusos y aumento de la pobreza, escenario en que los más afectados serán los niños.
Evelyn Vicencio Rojas, Académica Escuela de Derecho, UNAB
Chile, un Estado fallido Chile es un "Estado fallido" porque se caracteriza por su incapacidad para tener el control sobre regiones de su territorio y para asegurar en ellas el Estado de Derecho y el monopolio de la violencia física legítima. Los responsables de esta situación son nuestras autoridades políticas y de gobierno que han permitido que nuestro país se degrade por su lenidad para aplicar la violencia física legítima del Estado a fin de conservar el orden público, su obligación esencial.
De la degradación de nuestro país dan cuenta no solo el incremento de la delincuencia, de la violencia, del crimen organizado, del terrorismo y del narcotráfico, sino que la decadencia de instituciones como el Congreso -que vulnera la Constitución Política al promover leyes que son de iniciativa exclusiva de Presidente de la República-; como el Poder judicial -cuyos jueces prevarican impunemente en las causas sobre derechos humanos-; la puesta en práctica de las ideas postuladas por el senador Quintana quien declaró "nosotros vamos a poner aquí una retroexcavadora, porque hay que destruir los cimientos anquilosados del modelo neoliberal de la dictadura" y por quienes como los convencionales constituyentes que -parafraseando a Alfonso Guerra, vicepresidente del gobierno español cuando los socialistas llegaron al poder en 1982- iban "a poner a Chile que no lo va a reconocer ni la madre que lo parió"; la clase política que no está dispuesta a renunciar al control sobre el aparato público.
Adolfo Paúl Latorre, abogado, Magíster en ciencia política
Atarimae
¿Sabe usted que significa "Atarimae" para los japoneses?
Atarimae para los japoneses significa que después de que ocupan algo, lo deben dejar mucho más limpio de cómo lo recibieron...
Una vez que asisten a los partidos de su selección, la barra de japoneses, en sendas bolsas azules, recolecta toda la basura que se juntó durante el partido en las tribunas.Ojo, y no solamente cuando ganan el partido, como hace solo días frente a Alemania, en el mundial de Rusia 2018, también lo hicieron cuando perdieron ante Bélgica en los octavos de final.
Raya para la suma y la pregunta de rigor: ¿Se imagina usted, si en nuestra cultura "chilensis" estuviese incluido el "Atarimae"?
Algo así como que después, de que hicieron "pebre" la Plaza Italia y sus alrededores, o los negocios de todo Chile, o las murallas que con tanto esfuerzo sus dueños las habían pintado, etcétera, al día siguiente hubieron vuelto con escobas a barrer, a pintar para cubrir lo pintarrajeado, o a devolver lo que se pudieron llevar por equivocación, etcétera, para dejar los lugares muchísimo mejor de cómo los encontraron antes de hacerlos "chupete". ¿Se imagina usted? "La limpieza y el orden son como una religión para nosotros en Japón y lo atesoramos" Saysuka, hincha japonesa...
Luis Enrique Soler Milla
Emprendimiento femenino
Vemos con mucha esperanza y alegría todos los esfuerzos que tanto el sector público como el privado han puesto por generar iniciativas que apoyen e impulsen el emprendimiento femenino, que se conmemoró el pasado 19 de noviembre. Sin embargo, al relacionarme con el entorno empresarial y emprendedor he visto cómo aún falta por emparejar la cancha en el sector laboral, ya sea de forma dependiente como independiente.
Uno de los datos más preocupantes postpandemia ha sido la dificultad para que las mujeres puedan incorporarse nuevamente al mundo laboral, constatando fuertemente el impacto de los estereotipos de género. En este sentido debemos hacernos cargo con urgencia de este tema entendiendo que, según un estudio de los ministerios de Economía, de la Mujer y la Equidad de Género, y Cadem, en pandemia la cantidad de mujeres que declararon tener un emprendimiento fue de un 24%, de los cuales el 53% se inició durante este período, principalmente por la necesidad de aumentar sus ingresos (50%) y por la necesidad de compatibilizar labores remuneradas y no remuneradas (24%).
Valeria Cea