Me siento muy honrado de la incomparable responsabilidad de asumir desde hace sólo unos días, el mando y dirección de las operaciones de Carabineros de Chile en la Región de Atacama. Sin lugar a dudas, mi mayor esfuerzo será estar presente junto a todos los Carabineros y Carabineras que me corresponde liderar, en cada lugar del territorio zonal, para llevar el orden y seguridad en su mayor plenitud, como lo demanda principalmente la ciudadanía y la legislación nacional.
Es por ello que, durante estos días continuaré desplegándome en terreno para ir interactuando y conociendo las distintas realidades de la zona y de esta forma continuar un trabajo coordinado con las demás autoridades y comunidad. En el plano interno, seré estricto asumiendo y exigiendo siempre el cumplimiento de nuestros principios y valores que son propios de todo Carabinero, para alcanzar las metas y lineamientos planteados por nuestro general director.
No cabe duda que los resultados obtenidos en recientes encuestas, dan cuenta que la evaluación de aprobación ciudadana a la institución alcanzó un 73%, el nivel más alto de los últimos 6 años. Pese a los incuestionables problemas de criminalidad que atraviesa nuestro país, que hacen a la Institución como uno de los actores más importantes para su contención o mitigación, las personas igualmente aportan con su confianza una alta legitimidad al quehacer de Carabineros de Chile, reconociendo el compromiso, esfuerzo, la mística de servicio público y profesionalismo de nuestro personal en el día a día, pero también por la cercanía, confianza y colaboración de la comunidad.
En la coproducción de seguridad pública, necesitamos la participación activa de la ciudadanía desde el nivel local, a partir de una efectiva organización y particularmente ejerciendo las medidas de autocuidado, para evitar ser víctimas de delitos y aportando, a través de sus denuncias, información relevante para focalizar y desplegar nuestros servicios policiales y sin perder la permanente interacción con nuestro personal en el territorio. Creemos que si bien, la delincuencia no se termina, siendo una realidad crítica en la actualidad por las nuevas tipologías de delitos, podemos mitigar sus efectos, al movilizar las fuerzas vivas de la comunidad, sumado además, bajo el principio de la corresponsabilidad, al trabajo responsable que nos compete desarrollar en forma integrada con diferentes autoridades e instituciones locales de acuerdo a su respectiva áreas de responsabilidad dispuestas en la ley. Es así como la visión sistémica de seguridad pública, aplicada en forma efectiva y compartida por los diferentes actores, es la mejor alianza y estrategia para enfrentar la delincuencia en forma más eficiente.
Jorge Muñoz Soto
Jefe de la III Zona, general de Carabineros