( viene de la página anterior )
Universidad de Chile se crea el Servicio Sismológico de Chile y el sismógrafo correspondiente a la Región de Atacama se instaló en el Liceo de Hombres de Copiapó, el cual se volcó en el terremoto de 1922".
El director del Museo Regional de Atacama, Guillermo Cortés, confirmó que "nosotros como país hemos avanzado mucho en cultura sísmica. Al día de hoy cuando ocurre un movimiento sísmico, la gente evacúa naturalmente y la norma de las estructuras de las viviendas y sitios en Chile piden ciertas características para enfrentar temblores".
Además, el historiador destacó que "tras el terremoto del 60' en Valdivia, que fue una prueba de fuego a las preparaciones del Gobierno frente a lo ocurrido en el terremoto de Vallenar, se ha ido profesionalizando el Centro Sismológico Nacional".
Maremoto en Chañaral
Según relata el historiador Omar Monroy, de la Dirección Regional Servicio Nacional del Patrimonio Cultural , el viernes 17 de noviembre el acorazado "Latorre" desembarcó con el Presidente de la República de ese entonces, Arturo Alessandri Palma, siendo recibido por el gobernador departamental, Roberto Carmona.
Viendo lo acontecido en Chañaral, Alessandri remitió un telegrama al ministro del Interior, detallando que "la situación de Chañaral es realmente pavorosa. Hemos recorrido doce cuadras de ruina y desolación absolutas, pisando sobre escombros. Se necesita tener la inteligencia muy cerrada, el alma muy negada a todo sentimiento humanitario, para criticar un viaje que es de muchos sacrificios y que produce mucha pena".
Tras el maremoto, Monroy manifestó que "en Chañaral se menoscabó el desarrollo económico y la Compañía de Minas y Fundición cerró definitivamente sus negocios mineros, cerrando las minas y establecimientos compradores de metales, lo cual originó que los pobladores emigraran a otros sitio".
Respecto a la madrugada del 11 de noviembre de 1922, mencionó que "aquella noche abundaron coterráneos desaparecidos, niños extraviados y naufragios que luchaban por sus vidas en el océano".
Asimismo, detalló el caso de Rosalba Basaure, pequeña niña que escapó milagrosamente de las oleadas que destruyeron la ciudad de Chañaral y logró tras días reencontrarse con su padre, quien había sido un náufrago en el mar y recorrió toda la costa buscando a su hija.
Vallenar en la actualidad
En la zona Carrizal Bajo, en Los Tollos llegaron olas entre los 7 a 9 metros de altura y una fuerza que dejó a las comunas de la Provincia del Huasco en ruinas.
Para el historiador Mario Rojas, el terremoto de 1922 de Vallenar "fue el primero en ser considerado el más grande en Chile y en el mundo, porque se sintió en Italia, en Bélgica y varias partes del mundo, afectando también a países vecinos como Argentina. Es más, este sismo produjo un maremoto desde Arica hasta Chiloé y mayormente con fuerza entre Chañaral y el puerto de Coquimbo, que sufrieron muchos daños".
Además, según el experto en esos años en la comuna de Vallenar "habían 800 casas y quedaron sólo 200 en pie, la cuales también tuvieron que echarse abajo porque quedaron en muy mal estado. Hoy en día, estando en el 2022, deben quedar probablemente entre 30 a 40 casas de esa época".
Respecto a si Vallenar estaría preparado para otro sismo de iguales proporciones, Rojas exclamó que "de volver un terremoto, va a volver. ¿cuándo? No lo sabemos. Pero creo que Vallenar, como ciudad, no está preparado para un sismo de tal naturaleza por su alambrado público o la lejanía del hospital con el centro urbano".
11 de noviembre de 1922 fue el maremoto que afectó a localidades costeras de la Región de Atacama, siendo las comunas de Chañaral y Caldera las más afectadas.
2.000 damnificados dejó el terremoto y maremoto de 1922 en Chile y en otros países según últimos estudios, de los cuales al menos 300 fueron en la ciudad de Chañaral.
40 casas quedan en pie en la actualidad en la comuna de Vallenar de las 800 viviendas que habían en 1922 y que fueron destruidas por el terremoto.