Redacción
Entrar a la cancha como campeones no fue motivo de relajo en Colo Colo y ayer le ganaron por 2-0 a O'Higgins en el estadio Monumental, donde además celebraron la estrella 33 y recibieron la copa.
La jornada en Macul estuvo cargada de festejos, comenzando con la participación de una banda musical que animó la tarde antes de comenzar el partido.
Después vino el duelo contra el cuadro rancagüino, que al menos en el primer tiempo tuvo pocas emociones.
Con algunas modificaciones por pequeñas molestias, los albos no pudieron imponerse en el juego y tuvieron que conformarse con mantener su arco en cero gracias a la sólida defensa y las buenas intervenciones de Omar Carabalí.
En tanto, los dirigidos por Mariano Soso no estuvieron finos a la hora de definir y una de las más claras en los pies de Pedro Pablo Hernández terminó en reclamos de los celestes por un pequeño empujón de Gabriel Suazo en el área.
Aunque el árbitro no percibió el contacto, el VAR lo llamó para revisar la jugada, pero mantuvo su decisión de no cobrar penal.
Ya en el complemento, Colo Colo subió la intensidad y salió a buscar los tres puntos, atacando con mayor frecuencia.
Una de las razones que explica el aumento de la dinámica fue el ingreso de Marco Rojas -por Agustín Bouzat-, que fue clave en ambos goles del Cacique.
Localía perfecta
La apertura del marcador llegó a los 64 minutos en los pies de Gabriel Costa, quien se encargó de definir frente al arco tras una asistencia del chileno-neozelandés que ingresó en la segunda mitad.
Después vinieron minutos de repliegue en los albos y O'Higgins salió a buscar la igualdad.
Así vinieron algunos remates de los celestes y una de las más claras fue de Fausto Grillo, que tuvo un disparo que pasó muy cerca del arco de Omar Carabalí.
En la jugada también hubo reclamos por un posible penal contra el zaguero, pero el árbitro lo desestimó.
Costa pudo aumentar las cifras para Colo Colo, pero se perdió el segundo frente a una certera salida de Alexis Martín después de una buena asociación con Marcos Bolados.
Cuando se jugaba el tiempo adicional, el equipo de Rancagua tuvo un córner a favor y el portero subió a cabecear, pero terminó en gol para los locales.
Tras el despeje de la defensa alba, Rojas tomó el balón, cruzó la mitad de cancha y vio el arco vacío, definiendo desde muy lejos con precisión.
Así, Colo Colo cerró sus partidos de local invicto y llegó a 62 puntos a falta de una fecha, donde enfrentarán a Ñublense en Chillán.
Tras el partido vinieron los festejos, donde todos los jugadores del plantel recibieron la medalla de campeón y los hinchas corearon los apellidos de todos los futbolistas.
Luego le entregaron la copa al capitán del Cacique, Gabriel Suazo, y comenzaron las celebraciones del mejor equipo de la temporada.
Con el trofeo en mano, el equipo dio la vuelta olímpica acompañados de familiares y cercanos mientras hubo un juego de luces y fuegos artificiales.
Una vez terminado el Campeonato Nacional, el Cacique cerrará la temporada con amistosos frente al Real Betis y River Plate.
