Alejandro Núñez
Buen ánimo existe en el mundo ganadero tras las lluvias que se han registrado este año en la Región de Atacama. Según información expertos del Programa de Desarrollo Local (Prodesal) en diciembre se espera que el ganado caprino en la región aumente en un 50%, pero también temen que haya una sobre reproducción que eleve las cifras hasta tres veces como en 2017 que finalmente generó el colapso del alimento y la posterior muerte.
Karen Campillay, coordinadora de Prodesal Vallenar, comentó que "nosotros esperamos que no se triplique la masa ganadera porque después se nos convierte en un lío con la sequía donde hay mucha mortandad".
Desde Prodesal informaron que en Vallenar actualmente hay una masa ganadera caprina de 8 mil cabezas. Cabe señalar que hace 10 años esta cifra superaba las 20 mil cabezas, pero se redujeron por la sequía.
Sobre la proyección para este año, Campillay afirmó que "se puede duplicar o más la cantidad de ganado caprino, pero no es lo indicado porque si ellos suben la cantidad de animales porque nuevamente vamos a tener el punto de quiebre en abril del próximo año con una gran mortandad porque la masa ganadera va crecer y después nuevamente nos va azotar la sequía".
Cabe señalar que los sistemas frontales que afectaron a la zona en el mes de junio y julio dejaron una acumulación de agua caída en Caldera de 29,1 mm, Copiapó 11,6 mm y Totoral 85,3 mm, Huasco 50,3 mm, Vallenar 60, 8 mm, Freirina 70,9 mm y Domeyko 98.9 mm.
Por su parte, Marcelo Salazar, técnico del Prodesal en Freirina comentó que actualmente en Freirina hay cerca de 6 mil cabezas de ganado caprino. "Muchos de los ganaderos generan la reproducción de su ganado en el mes de marzo para esperar la parición en el mes de agosto o septiembre, pero la recomendación técnica que hizo el programa fue cambiar esa metodología para esperar lluvias", resaltó.
El Prodesal de Freirina también espera que la cantidad de animales aumente un 50%. Sobre las medidas que han tomado para que no haga una sobrereproducción, Salazar, enfatizó que este proceso depende netamente "de la decisión de los crianceros" y recalcó que se ha recomendado a sobre explotar en la reproducción.
"El criancero es medio porfiado porque son principalmente adultos mayores dado que no hay renovación generacional y aparte están solos. Son como la última generación de crianceros y por eso cuesta que nos hagan caso", describió.
El Prodesal que es dependiente del Instituto de Desarrollo Agropecuario (INDAP) centra la atención en los Microproductores, que corresponden a productores con baja dotación de recursos productivos y activos, quienes desarrollan agricultura en ecosistemas frágiles, agravados por el cambio climático, en particular el déficit hídrico, limitando el potencial productivo de sus unidades de producción. Sus ingresos totales no les permiten vivir fundamental o únicamente de la agricultura, por lo que deben complementar sus ingresos con otras fuentes extra prediales (multiactividad). Adicionalmente, estos productores se encuentran ubicados en sectores rurales, donde existen carencias de acceso a bienes y servicios sociales que afectan directamente sus condiciones de vida.
Tito Villalobos director regional (s) del Instituto explicó que "como INDAP en la región desde el 20 de Julio comenzamos a entregar sacos de concentrado animal para los usuarios Prodesal como una forma de ir en apoyo oportuno a estas familias para complementar el forraje natural junto con el que está entregando el gobierno regional a través de la seremi de agricultura para los animales. Desde esa fecha hemos ejecutado más de 30 millones de pesos beneficiando a 322 usuarios que tienen el rubro de crianza de animales como rubro principal o secundario, con casi 70 toneladas de pellet de concentrado animal".
"Esperamos que no se triplique la masa ganadera porque después se nos convierte en un lío con la sequía donde hay mucha mortandad"
Karen Campillay, coordinadora Prodesal Vallenar.
"El criancero es medio porfiado, porque son principalmente adultos mayores dado que no hay renovación genracional y aparte están solos".
Marcelo Salazar, técnico del Prodesal de Freirina.