Activistas exigen a la Municipalidad de Copiapó la entrega de tratamientos paliativos en base a cannabis
CONVENIO. La agrupación afirma que el municipio entregó treinta y cinco millones de pesos para elaborar doscientos tratamientos anuales cuyo stock está disponible. Sin embargo, la administración no habría cumplido con el retiro y distribución de estos productos.
El colectivo Activista Cannábico Atacama en conjunto con integrantes de la Fundación Daya, entregaron un oficio a la Municipalidad de Copiapó para manifestar su descontento ante el estancamiento en la ejecución de un convenio, el cual establece que la casa edilicia se encargaría de solicitar y entregar un stock de doscientos productos de cannabis al año como alternativa paliativa para pacientes con dolores crónicos.
El acuerdo fue firmado en el año 2015, entre la administración de ese entonces y la Fundación Daya, organismo orientado a la creación de tratamientos complementarios para reducir el dolor de ciertas patologías. Son ellos quienes tomaron la responsabilidad de fabricar estos productos y hoy están a la espera de que sean distribuidos entre la comunidad copiapina.
Colectivo
La Fundación Daya recibió treinta y cinco millones de pesos para la elaboración de tratamientos, los cuales se encuentran disponibles y están a la espera de que sean solicitados por el municipio para su distribución.
Al respecto, el concejal Juan Manuel Cáceres, señaló que "no sabemos cuáles serán las razones del municipio para no solicitar el resultado de un servicio que ya pagó. Por eso entregamos este oficio, es plata que ya invirtió el municipio y que va en directo beneficio de nuestra comunidad. Todos estos tratamientos son utilizados para reducir los efectos del dolor crónico en pacientes aquejados por distintas patologías" puntualizó.
Beneficios
Para los pacientes de la Fundación Daya, la cannabis se ha transformado en un "compañero de vida" el cual les ha permitido contrarrestar algunos dolores crónicos que padecen.
En este sentido uno de los integrantes de esta organización indicó que "entendemos que no es una cura, pero sí alivia bastante los procesos que son muy dolorosos, desde ahí queremos generar el cambio de paradigma que la marihuana no es una puerta de entrada a drogas duras, no es nada de lo que se plantea, sino que incluso hay estudios que demuestran que hay personas que hacen reinserción social con marihuana".
Por su parte, Nina Vega paciente con Epilepsia Refractaria relató que desde que complementa su tratamiento químico con "gotas cannábicas" sus crisis han disminuido.
"Tomo gotas cada seis horas y me han hecho muy bien, debo reconocer que con el tratamiento químico que aún mantengo entre comillas acompañado de productos derivados de la cannabis han hecho que no tenga episodios de epilepsia hace más de tres meses".
El Diario de Atacama estableció contacto con la Municipalidad de Copiapó a fin de conocer su versión respecto al hecho denunciado por la agrupación. Sin embargo, desde la casa consistorial declinaron referirse al tema.
"Es plata que ya invirtió el municipio y que va en directo beneficio de nuestra comunidad. Todos estos tratamientos son utilizados para reducir los efectos del dolor crónico en pacientes aquejados por distintas patologías".
Juan Manuel Cáceres, Concejal de Copiapó