Boric extra mayo
Aldous Huxley, el autor de "Un mundo feliz", la novela distópica más famosa de la historia, planteó que la efectividad política depende más de los métodos que se usan, que de la doctrina que se promulga. Entendida la gobernanza de esa forma, lo verdadero o falso, lo correcto o incorrecto, importarían menos para lograr las simpatías de las personas, que el uso adecuado de los gestos y las formas.
Es consabido que la política es el "arte de…", y coloque aquí el sustantivo (objeto de forma), que mejor opere a sus intereses. Adjetivar la dimensión política entonces no tiene mucha importancia, pues siempre el político intentará que los ciudadanos estén a favor de sus ideales y en contra de las ideas de su opositor.
El gobierno que se instalará en marzo, y que ya ha anunciado su gabinete, ha jugado y seguirá jugando las cartas de las "formas" que mejor opere a sus intereses. Aquello es esperable, corriente y legítimo, pero una ciudadanía perspicaz debe saber leer ese naipe para reaccionar con inteligencia y sentido común.
Y he aquí lo gestos y formas de Gabriel Boric: repartir cuchuflís a la prensa apostada en "La Moneda chica", colocar de telón de fondo las puertas del Museo de Historia Natural para anunciar a sus nuevos ministros, saludos y selfies cariñosas entre vallas papales en la sede de gobierno, la compra de su Barros Luco extra mayo de cena. Si observa con detenimiento, verá entonces la forma, el sustantivo, que revela una personalidad, una tipología de cercanía y los efectos hasta ahora positivos que esto ha provocado en la población.
Políticos, administradores y jefaturas saben que "todo comunica", el punto es que mientras más grande es el rol de la autoridad, más profundo debiera ser el sondeo para mostrar y explicar los mecanismos de comunicación del gobernante.
Goebbels, acerca de la propaganda, hablaba de ese pequeño número de ideas que debían repetirse una y otra vez para alcanzar relevancia y legitimidad (forma de nuevo), y todo buen político sabe que necesita apropiarse de un territorio (por repetición) que lo haga único y deseable.
Hasta ahora el discurso "formal" de Gabriel Boric, en lo estrictamente comunicacional, incluido los gestos de su propio gabinete, han sido coherentes con lo prometido de cara a la ciudadanía. La gente saluda, festeja, choca los puños, se toma fotos y aplaude el sándwich del futuro presidente de Chile. Un acierto, pero la historia también determina que nada se sostiene por mucho tiempo sin una base sólida que resista los embates de una realidad siempre adversa. Esto solo será visible cuando más allá de los gestos, comiencen a operar los criterios, decisiones y acciones, que la ciudadanía sí o sí juzgará y adjetivará, como ha sido siempre.
Maciel Campos Líder Académico de la Facultad de Comunicaciones y Artes de la Universidad de Las Américas
Pensión Garantizada I
A raíz de los porcentajes negativos en las AFP de los fondos "D" y "E" el año 2021, a miles de mayores le rebajaron sus pensiones.
En comparación a diciembre del 2021, mi pensión de enero 2022 sufrió rebaja de $ 60.092.
El gobierno no se ha pronunciado sobre la disminución de pensiones en jubilados de las AFP desde enero 2022; menos en dictar una ley para compensar las pérdidas.
Este 26 de enero el congreso aprobó la "Pensión Garantizada Universal" (PGU), asegurando el Presidente Piñera que "está financiada". Pero, han discriminado a quienes "no estamos en el pilar solidario", porque deberemos esperar hasta agosto 2022, para cobrar la "PGU".
Esto repercute negativamente en cerca de 700.000 jubilados. El IPC del año 2021 fue de 7,2 % y muchos productos han subido de precio; lo cual afecta a los que nos rebajaron las pensiones en las AFP y, a quienes nos han obligado a que llegue agosto del 2022 para cobrar $ 185.000. El Salmo 71, 9 dice: "No me rechaces ahora en la vejez, no me abandones".
Derico Cofré Catril
Pensión Garantizada II
La pensión garantizada universal -PGU-, es un éxito transversal, desde el Gobierno hasta el Poder Legislativo, en donde se pone fin a casi tres periodos presidenciales sin avances en temas de previsión.
La PGU tiene doble mérito, en primer lugar prioriza a nuestros adultos mayores, y en segundo lugar, en particular, a los adultos mayores de clase media.
Por otro lado, se pone fin al desincentivo a la cotización, pues el antiguo pilar solidario entregaba un mayor aporte a quien menor ahorro previsional tuviera, pasando ahora a ser un pensión garantizada universal sin distinción, la cual es complementada con la pensión contributiva a partir de los ahorros previsionales de cada trabajador.
Finalmente, destacar que la PGU es un justo beneficio a quienes de una u otra forma construyeron este país, el cual hoy puede retribuir una pensión de $185.000 a sus adultos mayores.
Eduardo Jerez Sanhueza