Es difícil no tener una opinión crítica a cómo se están implementando las leyes de protección animal y tenencia responsable en nuestro sistema legal, sobre todo cuando nos enteramos de hechos impactantes. Como sociedad nos acostumbramos a no prevenir y solo reaccionar, pero ¿Qué pasa al enterarnos de la muerte de una persona atacada por perros con o sin dueño? Indudablemente, surge la pregunta ¿Qué pasa con las leyes?, ¿Necesitamos que nos fiscalicen continuamente para cumplir nuestros deberes? ¿Exigimos que respeten nuestra libertad, sin respetar la libertad ajena, en un país donde convivimos en un entorno diverso en especies?
Si bien Chile cuenta con la Ley de Tenencia Responsable de Mascotas, donde se entregaron responsabilidades al Gobierno, Municipios y Ciudadanos, no se está implementando de forma óptima; no basta solo con destinar recursos (que han disminuido drásticamente) para ejecutar programas de cuidados básicos de mascotas, sino que falta educar y abordar las temáticas de Salud Pública, Ambiental, Seguridad y Responsabilidad Ciudadana con la profundidad y urgencia necesarias. Se promulgan leyes, pero continuamos igual o peor respecto a tenencia responsable de mascotas y protección ambiental.
La educación es fundamental en todos los ámbitos y este no es la excepción. Tantos médicos veterinarios, ONG, y ciudadanos, estamos de acuerdo en ello, intentando convencer a las autoridades. Pero ¿qué podemos hacer, si en la Ley de Protección Animal, desde el año 2009 fue encomendada esta tarea al Ministerio de Educación y aún no se incorpora en las mallas curriculares obligatorias? Lo mismo sucede con la fiscalización, pues se entrega la responsabilidad a municipios y policías, pero no los recursos y capacitaciones para la implementación eficiente, dejando la decisión a la voluntad de cada edil, quien finalmente prioriza las necesidades, según los recursos disponibles de cada comuna.
Así, es claro que estamos en un sistema donde es necesaria la colaboración de todos los actores sociales involucrados para lograr avanzar, sin embargo, también es necesario que el Estado entregue más recursos y fiscalice activamente, para que se implementen efectivamente y las leyes no se conviertan en letra muerta.
Úrsula Pacheco
Coordinadora Tenencia Responsable Consejo Regional de Atacama del Colegio Médico Veterinario