Proyecto Lobo Marte podría comenzar su construcción en 2025
MINERÍA. Empresa Kinross dijo que estudio de factibilidad "reafirmó las anteriores evaluaciones" y que iniciativa, que busca dar continuidad a sus operaciones, podría añadir potencialmente un total de 4.7 millones de onzas de oro.
Redacción
En el año 2025 podría comenzar su construcción el proyecto Lobo Marte de la empresa Kinross Chile, que ayer anunció los resultados del estudio de factibilidad de esta iniciativa.
La compañía, de todas formas, precisó que los plazos del proyecto dependerán de la obtención de permisos y de la conclusión de la explotación minera en La Coipa, situada a unos 50 kilómetros al noroeste de Lobo Marte. Esto debido a que se prevé que dicho proyecto se abastecerá de la misma fuente de agua que La Coipa ha utilizado históricamente en sus operaciones. En ese sentido, Kinross agregó que espera entregar una actualización del estudio de expectativa de vida útil de La Coipa hacia el primer trimestre del 2022.
Los proyectos de extensión de la vida de la mina de La Coipa se encuentran en proceso de estudios y tienen contemplado la incorporación de depósitos satélites existentes en el distrito minero. La ejecución de dichos proyectos de extensión podría modificar los tiempos de Lobo Marte.
Capital
Dentro del documento de resultados de prefactibilidad se destaca que el capital inicial estimado de Lobo Marte será de 1.080 millones de dólares y que incluso se podrían añadir un total de 4.7 millones de onzas.
Al respecto, Rolando Cubillos, Vicepresidente y gerente general de Kinross Chile, señaló que "Lobo Marte puede añadir potencialmente 4,7 millones de onzas a nuestro perfil de producción durante su vida útil. El proyecto se encuentra en una zona de la alta cordillera, donde tenemos vasta experiencia y en la que hemos operado eficazmente durante más de 30 años. En ese sentido, Lobo Marte tiene el potencial de ser un activo fundamental en un país con una larga y exitosa historia minera". La primera producción se espera para 2027.
Diseño
Rodrigo Moscoso, gerente general de KMC y quien está a cargo del proyecto Lobo Marte en Chile, indicó "el diseño tuvo como objetivo principal minimizar las interacciones que el proyecto tendría con áreas y receptores sensibles existentes en la vecindad del proyecto, lo cual fue logrado a través de la incorporación de los lineamientos y recomendaciones que las autoridades han entregado para proyectos equivalentes en entornos similares, complementado con un conocimiento profundo y detallado de las condiciones de base existentes en el territorio".
Otro pilar, según dijo, fue la incorporación en las etapas más tempranas del proyecto a miembros de las comunidades que son parte de su área de influencia, para que de una manera libre e informada conocieran las características del proyecto, nos transmitieran sus preocupaciones e intereses y que conjuntamente, en base a un dialogo permanente y genuino, encontrar las mejores soluciones que no solo garanticen la inocuidad del proyecto en su calidad de vida y costumbres, sino también contribuya tangiblemente al desarrollo sustentable de las comunidades respetando su cultura y fomentando la generación de valor compartido .
Según Kinross, la siguiente etapa es la elaboración del Estudio de Impacto Ambiental y la tramitación de todos los permisos aplicables. Se espera que el proceso de obtención de permisos demore aproximadamente tres años, asimismo, la compañía también seguirá dialogando y haciendo partícipes a las comunidades locales y a las partes interesadas.
"Lobo Marte puede añadir potencialmente 4,7 millones de onzas a nuestro perfil de producción durante su vida útil" Rolando Cubillos Vicepresidente y gerente general de Kinross Chile