Un mejor compliance
Señor director: En los últimos días hemos visto cómo grandes empresas han sido descubiertas en irregularidades que las tienen bajo la mira de la justicia, desde faltas a la libre competencia hasta acusaciones de colusión. Cabe preguntarse, entonces, qué está pasando con la ética empresarial, y aún más, con los sistemas anticorrupción de estos grandes conglomerados.
Los modelos de compliance han sido una de las soluciones que las compañías han presentado para prevenir o hacer frente a este tipo de situaciones, sin embargo, en muchos casos estos han sido implementados y, aún así, no ha sido suficiente.
¿Para qué existe, entonces, el compliance? Es una duda válida cuando vemos que multinacionales como Samsung Electronics Chile alardean de estar certificados en su Modelo de Prevención de Delitos, pero, por otra parte, enfrenta demandas por imponer precios de reventa de smartphones a sus distribuidores locales, afectando la libre competencia y los precios a los que acceden los consumidores.
Urge una legislación y sistemas de certificación más estrictos en materia de compliance, pues está demostrado que, en reiteradas ocasiones, confiar en las buenas intenciones de una empresa no está previniendo que quienes la conforman cometan actos en contra de la ley.
Kristopher Brigham, socio de ARCH.
China y el problema del carbón
China pasa por una situación compleja. Pese a ser uno de los mayores productores del mundo de carbón, el país asiático sufre una fuerte crisis energética por su escasez e incluso ha tenido que racionar con la debida paralización de fábricas y producción en general, lo que sin duda amenaza el boyante crecimiento de su economía.
Por si esto fuera poco, los centros de extracción del mineral se han visto afectados por fuertes lluvias y accidentes de sus trabajadores. Estos hechos en conjunto han hecho que el precio del carbón se eleve. Dar con una solución a este escenario no es tarea fácil, aunque si lo miramos en un mediano plazo es posible soslayarlo, y las energías limpias son la respuesta.
Las ERNC llegaron para quedarse, mejorando la calidad de vida de todos y reduciendo la huella de carbono de la industria en general. Chile tiene un potencial gigante para desarrollar energía fotovoltaica, eólica e hidrógeno verde. Para más ventaja todavía de nuestro país, tenemos una costa enorme y muchos puertos cercanos a grandes ciudades capaces de exportar Hidrógeno Verde.
Recordemos que el Gobierno anunció la primera planta para desarrollar este combustible en el extremo sur, con la posibilidad cierta de producirlo a un costo bajísimo en comparación con otras naciones. Esperamos que estos anuncios se sigan materializando con fuerza y en un tiempo más podamos vender energía, y ¿Por qué no? Incluso la que el gigante asiático necesita.
Víctor Opazo Carvallo, CEO de Solek Chile
Presupuesto
En un momento muy especial del país, nuestro Estado nos dice que rebaja un 22,5% su presupuesto para 2022, pero en realidad lo sube en un 3,7% respecto a su gasto regular 2021.
Esto significa que no existe la intención de terminar con programas malos, mal evaluados o desplazables en el entorno de urgentes prioridades actuales.
Jorge Porter
Inclusión
En el marco del mes de la inclusión, es relevante hacernos las siguientes preguntas: ¿Qué tan inclusivos somos? ¿Mis acciones reflejan lo inclusivo que soy? ¿Es solo un discurso políticamente correcto? Esto es determinante para reconocer si hemos avanzado como sociedad y si realmente la diversidad se constituye como un valor y no como una acción momentánea que nos hace aparentar lo progresista que podemos ser.
Desde los sistemas internacionales e interamericanos en materia de Derechos Humanos, se han declarado tratados generales y específicos que sin duda contribuyen en aceptar la diversidad como parte de las obligaciones de los Estados. Observamos la manera en que existen diversas convenciones que condenan la discriminación racial o contra la mujer, y que protegen a los grupos en situación de vulnerabilidad como los niños y niñas, los migrantes, las personas mayores y aquellas en situación de discapacidad. A partir de estos acuerdos, las legislaciones de diversos países han adoptado medidas que favorecen la inclusión social. Si bien se han hecho avances, existe una brecha importante si analizamos con atención las actitudes y acciones en nuestra vida cotidiana y que se traducen en condiciones de exclusión social, como los discursos aversivos, las conductas agresivas de algunos grupos frente a la diversidad sexual, las miradas atónitas frente a personas con discapacidad que presentan distinciones físicas aparentes, y las siestas interminables de las personas en el transporte público que evaden la obligación legal de dar el asiento a las personas que lo requieran. Entonces cabe pregúntanos ¿Qué tan inclusivos somos?
Evelyn Puga, directora Escuela Terapia Ocupacional UDLA