Surgen críticas al proyecto piloto que haría crecer el Desierto Florido todos los años
INICIATIVA. Cristina Dorador, Jorge Baradit y el director del Ceaza Carlos Olavarría no estuvieron de acuerdo con el programa, mientras que museólogo y experto en el tema dijo que esto no sería buena idea, y que el sector debiera florecer a su tiempo. Delegación Presidencial defendió la iniciativa con énfasis en turismo y consejero encargado explicó que es "plan piloto pequeño".
El viernes recién pasado, desde la Delegación Presidencial y diversas instituciones públicas informaron que se haría un proyecto piloto de riego, para que el Desierto Florido creciera durante todos los años.
Pero ayer, a través de redes sociales, se han viralizado variadas criticas ante tal programa. Sin embargo, quien lidera la idea, argumentó que esto es solo un proyecto piloto y que se ocuparán solo tres hectáreas de las 400 que contempla el Desierto Florido.
Criticas
Jorge Baradit, constituyente y escritor reconocido a nivel nacional, a través de su Twitter expresó sobre el proyecto que "Estupidez neoliberal. Convertir un fenómeno natural espontáneo en atracción turística artificial. De paso, dañando una maravilla de a naturaleza".
Por su parte, Cristina Dorador, científica y constituyente del Distrito 3, por medio de la misma red social, comentó : "Sistema de regadío automático en tres hectáreas en Atacama para tener Desierto Florido todos los años. Una idea que muestra las lógicas imperantes respecto al pensar la naturaleza. Lo artificial, lo económico, lo utilitario".
Así también lo señaló Carlos Olavarría, director ejecutivo del Centro Científico Ceaza, señalando que esto es una "aberración" y sugiere que las autoridades de la región se asesoren con algún especialista.
¿Qué sacamos con esto?
Al respecto, Raúl Céspedes, museólogo e investigador, explicó que esto es un ecosistema endémico que se despierta cuando las lluvias hacen que el letargo que tienen por años se pueda manifestar y que en ese sentido "yo creo que no seria bueno hacerlo como todos los años, porque se supone que todas estas especies endémicas, que son la flora y fauna, que ahí también tenemos insectos y un montón de otras especies, tienen que de alguna forma acostumbrarse a esto y justamente su ecosistema esta adaptado a eso".
El experto además se cuestionó "¿Qué sacamos con esto?, porque resulta que muchas veces no hay una responsabilidad de la gente para visitar esto (…) por lo tanto creo que es importante que el desierto florezca cuando tiene que florecer".
Así también continuo comentando que este proyecto primero se debe incursionar "hay que ver si efectivamente va a resultar o no, porque el desierto puede que hay algunas especies que florecen con la misma intensidad cuando hay lluvia, hay algunas que nacen primero y otras después y asociado a eso tenemos aves, insectos, lagartos, tenemos una serie de ecosistemas que también hace que esto este vulnerable a eso".
Además, expresó que el gran problema es que "estos sistemas no son protegidos, en el sentido que por ejemplo cuando hay lluvia, hay Desierto Florido y se vuelven todos locos y nadie se preocupa por eso".
"Es un plan piloto pequeño"
Por su parte, Roberto Alegría, consejero regional y quien lidera el proyecto de riego, explicó que esta idea más que cultivar el desierto, es hacer un estudio científico y ver cuales son las propiedades medicinales que tienen estas plantas, donde se van a ocupar tres hectáreas de las 400 que hay en la región "Esto es un plan piloto pequeño, es una milésima parte del desierto en la cual se va a experimentar, esa es la idea".
Además, respecto a las criticas, argumentó que no se va a intervenir el desierto en su totalidad "es una milésima parte, eso es un plan piloto. Entonces yo creo que a lo mejor los titulares producen impacto (…) insisto, esto es un plan piloto en el cual se va a intervenir una hectárea en la Provincia de Copiapó y una en la Provincia de Huasco y vamos a ver qué es lo que ocurre con nuestro Desierto Florido".
Delgado Presidencial
Consultado por las criticas, Patricio Urquieta, delegado presidencial, explicó que esta iniciativa "considera el riego de 3 hectáreas de las 400 mil que componen el desierto florido, y es de carácter fundamentalmente científico pero también tiene un rol turístico, porque permite que las personas que son visitantes nacionales o extranjeros puedan apreciar cómo florece el desierto más árido del mundo en la Región de Atacama, y el contraste que existiría si ven el desierto con una floración tipo oasis, que demostraría con claridad cómo es el fenómeno natural único en el mundo".
Urquieta continuo comentando que esto se logra con estudios científico continuos en el desierto que pueden durar cinco o 10 años, "para ver cómo se comporta una flor en las condiciones desérticas en las que sobrevive, y finalmente, si esos insumos nos permiten extrapolar todo ese conocimiento a otras áreas que nos permitan por ejemplo transformar la agricultura nacional, la producción de alimentos e incluso el uso del suelo fiscal".