Vanessa Carrasco
Desde el martes 10 de agosto, el Sindicato de Trabajadores N°2 de Lumina Copper se encuentra en huelga legal, tras haber dado por frustradas dos jornadas de mediación obligatoria con la empresa, no pudiendo llegar a acuerdo en cuanto a reajustas salariales, modificaciones en los cálculos de los bonos de producción y beneficios.
El pasado miércoles, y pese a que la compañía ofreció una oferta que en palabras de ellos "era mejor a la acordada con el mismo sindicato en la negociación de 2018", el sindicato debido a que esta se realizó bajo el Art. 365 del Código del Trabajo (que obliga a las empresas a negociar), oferta que -según el sindicato- no contemplaba nada nuevo a lo que se había rechazado en la oferta anterior en el proceso de mediación obligatorio.
Negociación
El detalle de los montos ofrecidos por Lumina Copper consideraba un bono de término de conflicto de $3 millones, otro de préstamo blando de $3.5 millones y un bono de permanencia de $9.5 millones (que se divide en 36 meses y que debe ser reintegrado en su totalidad por los trabajadores a la empresa en caso de desvinculación o renuncia voluntaria), además de $1.5 millones por concepto de jornada excepcional de trabajo.
De acuerdo con Marco García, presidente del sindicato N°2 de trabajadores de la empresa, otro de los puntos que tiene detenidas las conversaciones son las cláusulas de ajuste de los bonos de producción trimestrales y anuales que "como se encuentran en el papel actualmente no reflejan ninguna bonificación para el bolsillo de los trabajadores en la realidad. Con las cláusulas que ellos proponen los bonos no pagarían". Sin considerar, además, propuestas en materias de salud, educación y bienestar social.
Para García el mejor ejemplo del cálculo perjudicial es que "otro de los sindicatos que negoció en marzo y que está vigente con esta propuesta de la compañía, no está recibiendo un peso por concepto de bono de producción".
Según García, esta situación es grave y "parte de nuestro reclamo es que la compañía está produciendo ahora y en los próximos años, ganancias con precios del cobre totalmente favorables y lo que esperamos es que la compañía comparta esas ganancias con los trabajadores, en donde se trate de ganar ganar, aunque al parecer sólo quieren ganar ellos".
Además del cálculo del bono que los trabajadores consideran perjudicial, la empresa estaría planteando imposibilitar a los sindicatos sobre la revisión o reclamo por no pago de los bonos por algún incumplimiento de las metas de producción; impidiendo que, por ejemplo, los trabajadores puedan recurrir a Tribunales en la materia o incluso a la Inspección del Trabajo, situación que el sindicato no quiere aceptar en la negociación en curso.
Otra de las materias en discusión es la extensión de los acuerdos de la negociación del sindicato 2 (actualmente en huelga) al sindicato 1, que ya negoció en el mes de marzo aceptando la oferta de la empresa. "Es imposible que consideremos esta opción porque ellos (sindicato 1) ya negociaron; esto siempre entrampa las negociaciones porque siempre en las organizaciones hay un sindicato pro empresa al que ellos buscan favorecer y esto complica las conversaciones" puntualizó el presidente del sindicato, Marco García.
El sindicato N°2 está compuesto por más de 300 trabajadores del área mina, planta y mantenimiento; y es el que tiene mayor representatividad entre los trabajadores propios de la minera.
Según relató García "todo el proceso productivo de Caserones está detenido desde el 9 de agosto, no se está produciendo nada, han intentado producir con menor tonelaje, sin el personal adecuado y eso puede incluso dañar los equipos". García además desmintió que los trabajadores mantengan bloqueados los accesos a la faena y enfatizó que "lamentablemente la compañía ha estado cerrada al diálogo y ha puesto todos sus esfuerzos económicos en el arriendo de 6 helicópteros, aún cuando las rutas están expeditas desde la última mediación a la cual la compañía ni siquiera se presentó".
Empresa
Por su parte, Lumina Copper manifestó a través de un comunicado que "la oferta de la compañía era mejor a la acordada con el mismo sindicato en la negociación de 2018, incorporando dos nuevos bonos y mejorando los actuales en materia social, educacional y de salud."
Actualmente, los trabajadores se encuentran a la espera de las gestiones de la Dirección Nacional del Trabajo en forma conjunta con la Dirección Regional, manifestando que "siempre hemos estado dispuestos a negociar y confiamos en las gestiones de la cartera a nivel nacional" finalizó García.