Ley Ricarte Soto sin fondos
Una vez más, los pacientes con enfermedades poco frecuentes y de alto costo han quedado excluidos. Esto, luego de que en la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados se informara que la Ley Ricarte Soto no podrá sumar nuevas patologías en el decreto que comenzará a regir en 2022.
Según indicó la Dirección de Presupuestos del Ministerio de Hacienda, para poder incorporar nuevas garantías se requiere que se dispongan fondos adicionales, por lo que solo podrían financiar tratamientos alternativos a las enfermedades ya cubiertas.
En el discurso de promulgación de la ley, la Presidenta Michelle Bachelet sostuvo que "el Estado hoy día está asumiendo el rol que le corresponde, protegiendo y velando por la salud de todos y todas, sin distinción alguna". Sin embargo, en estos momentos, aquello se queda solo en una promesa incumplida.
Es inaceptable que luego de años esperando, se nos cierre la puerta de esta manera. Somos muchas las agrupaciones de pacientes que hoy vemos con desesperanza el futuro de miles de personas que necesitan de terapias oportunas. ¿Cómo es posible que el Estado no sea capaz de brindar una salud digna a quienes hoy ven desvanecidas sus oportunidades y pelean contra el tiempo?
Es claro que no podemos seguir esperando. Necesitamos medidas reales que signifiquen un alivio para aquellos que, de no acceder a sus tratamientos, están destinados a sufrir secuelas irreversibles e, incluso en algunos casos, condenados a la muerte.
En cada decreto de la Ley Ricarte Soto existe una esperanza. Por eso, hoy le pedimos a los ministerios de Hacienda y de Salud que nos entreguen una solución, ya que lamentablemente, una vez más, los enfermos han quedado desprotegidos.
Myriam Estivill, directora ejecutiva y Vocera Fundación Chilena de Enfermedades Lisosomales (Felch)
Una previsión postergada
Señor director:
Nuevamente vemos como un Gobierno está llegando a término sin una reforma previsional potente, con acuerdos transversales, como lo fue la reforma previsional del año 2008, hace ya largos 13 años.
Parámetros relevantes como tasa de cotización y edad de pensión no han sido actualizados en 40 años, a pesar de que las expectativas de vida han aumentado cerca de un 50%. Sólo mejoras al pilar solidario, forzadas por multitudinarias marchas, han permitido mejoras a las pensiones solidarias, las cuales aún están al debe.
Dos comisiones previsionales altamente técnicas -comisión Marcel y comisión Bravo-, dejaron una hoja de ruta común para mejorar nuestro sistema previsional, pero la política, en sus ansias de mayor control y poder sobre las cotizaciones y fondos previsionales, ha frenado cualquier mejora a nuestro sistema previsional.
Esperemos que en el próximo Gobierno se concrete una reforma previsional que priorice a las personas y no al poder político sobre las pensiones.
Eduardo Jerez
De espalda a la infancia chilena
El rechazo al Kínder obligatorio ignora todas las investigaciones existentes de cómo la educación temprana favorece el desarrollo de niños y niñas y, en términos de justicia social, accede a espacios educativos y experiencias pedagógicas para impulsar la equidad e igualar oportunidades.
La principal razón está centrada en NO favorecer la escolarización a tan temprana edad, argumento que invisibiliza el rol profesional de las y los educadores de párvulos y todos sus marcos, mecanismos, instituciones y políticas públicas, todas ellas del nivel educativo que centran el juego como eje del aprendizaje, posiciona en un rol mediador a educadores, releva la importancia de las familias en procesos educativos, y potencian las interacciones y ambientes propicios que resguardan la calidad, pertinencia y coherencia de prácticas educativas y por ende, el rechazo a prácticas escolarizantes.
La escolarización en kinder no es algo nuevo, por ende no atribuible a este proyecto y que sin duda es una problemática que debe ser abordada. El rechazo a este proyecto no erradica el problema, de hecho lo perpetúa. No podemos dejar de lado que las políticas vienen acompañadas de una musculatura de seguimiento y cumplimiento, que permitiría pensar en un escenario más positivo para erradicar efectivamente la escolarización.
Finalmente, el rol que deben jugar las universidades y las Facultades de Educación de nuestro país, es protagónico y múltiple, en términos de levantar conocimientos por medio de investigaciones locales en torno a los problemas a la base de la escolarización, sumado al resguardo de sus planes de estudios y perfiles de egreso, potenciando la alianza bidireccional con centros de práctica que forman parte de la ejecución de los planes de estudios.
Dra. Patricia Soto de la Cruz, directora Pedagogía en Educación Parvularia Universidad Finis Terrae