La importancia de participar
La elección de gobernador regional en Atacama ha sido vista como un "saludo a la bandera" a procesos descentralizadores. Sin embargo, bueno es precisar que todo cambio cuesta y que si los electores van a las urnas, le darán más fuerza al proceso. El gobernador regional no tiene todas las atribuciones, pero igualmente decide en temas dado que será quien preside el Consejo Regional y elaborará políticas de desarrollo, entre otras materias.
Alo largo de diversas regiones durante los últimos días ha surgido el comentario o broma, sobre si en sus zonas debían optar por Karina Oliva y Claudio Orrego, a propósito de que los comicios a gobernador regional de la Región Metropolitana se ha tomado la agenda nacional, con dimes y diretes, en un hecho que puede ser visto como una anécdota, pero que refleja que hasta la elección que busca la descentralización terminó quedando centralizada y que Santiago y alrededores mantendrán un poder sin contrapeso al menos en los primeros meses de mandato de las nuevas autoridades.
De esta forma y, sumado que se trata de una autoridad que no tendrá todas las atribuciones que corresponden, queda la sensación que terminará siendo una figura decorativa, lo que claramente es un asunto agradable, pero lo cierto es que en esto hay que ser paciente y que esto debería ir cambiando, quizás a un paso más lento del que se quisiera.
Es primordial tener esto claro para evitar falsas expectativas, pero también es muy cierto que las transformaciones más profundas no se hacen de un día para otro y lo más probable es que con el paso del tiempo tengan más herramientas.
¿Qué podemos hacer por mientras? La respuesta es una: participar activamente. Hoy también se pone a prueba el interés de las zonas en asuntos que le darán mayor independencia y, por ello, el votar es clave para dar más validez al proceso que busca transformar la realidad de las regiones.
En el caso de Atacama se han escuchado quejas por la falta de candidaturas potentes y que, ante esto, es mejor quedarse en casa, pero esa idea está equivocada porque este proceso lo que más necesita es de mayor participación por el bien de todos.
Es muy probable que hoy haya una cifra menor de electores respecto a la última elección en que se elegían constituyentes, alcaldes, concejales y primera vuelta de gobernadores, lo que sería lamentable.
El interés por los cargos debe ser general y no pensar que solamente con la nueva Constitución se lograrán cambios profundos. Los gobernadores son actores importantes en la descentralización que debería ser uno de los ejes de la futura Carta Magna.