Todo apuntaba a que, durante la tarde de ayer, la Cámara de Diputados despachara a ley el proyecto que establece bonos de apoyo a las pequeñas y medianas empresas en el contexto de las ayudas económicas estatales durante la pandemia. Luego que el Senado aprobara -en segundo trámite- la normativa, la expectativa estaba en su pronto egreso de la corporación.
Sin embargo, una indicación del diputado Daniel Núñez (PC), según la cual los beneficios de apoyo a pymes debían también incorporar a los locatarios de ferias libres sin inicios de actividades ante Impuestos Internos (SII) devolvió la iniciativa al Senado, donde no se había programado una nueva vuelta al proyecto. Así, recién este viernes la propuesta esperaba ser revisada en el Hemiciclo. Su cierre aún puede dilatarse más: un eventual rechazo enviaría la propuesta a Comisión Mixta.
El parlamentario pidió dejar de lado la "soberbia" y no poner cortapisas a los más de 100 mil feriantes que hay en el país y que podrían recibir esta ayuda de hasta 1 millón de pesos a costo del fisco.
Debido a este inesperado retraso, el ministro Secretario General de la Presidencia, Juan José Ossa, lamentó la dilación.
"Nuestro propósito primero es auxiliar rápidamente a las pymes. En ese sentido, lamentamos que no haya ocurrido así. Respecto a las futuras sesiones, imaginamos que el propio Senado va a estar interesado en que se avance rápido", dijo el ministro de Segpres, quien aseguró que intermediaría con la directiva de la Cámara Alta, de manera de acelerar esta nueva revisión.
"Para efectos de una pronta promulgación, desde luego las pymes pueden contar que contarán con todas las urgencias que se requieran por parte del Ejecutivo", añadió la autoridad. El ministro de Hacienda había llamado temprano a despachar "lo antes posible" para empezar los pagos.