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Las comunas en fase 3 podrán tener cine, teatro y conciertos

PLAN PASO A PASO. Reapertura fue anunciada ayer por Cultura. También habrá posibilidad de vender comida en esos espacios, pero reduciendo los aforos.
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Redacción

El gobierno anunció que en las comunas que se encuentren en fase 3 del Plan Paso a Paso se modifica el aforo máximo para "eventos con ubicación fija y designada de los asistentes", permitiéndose de esta manera la reapertura de cines y teatros y "otros lugares clave para el desarrollo de la cultura", como también la realización de conciertos.

El Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio expresó que estos cambios realizados al plan de reapertura -a través de la Resolución 43 del Ministerio de Salud, publicada en el Diario Oficial el viernes 15 de enero- son modificaciones "muy importantes y esperadas para el sector cultural", mientras la ministra Consuelo Valdés valoró la medida y afirmó que "la prioridad es resguardar la seguridad de los espacios culturales para la ciudadanía".

75 y 150 personas

La medida permite que puedan reunirse 75 personas en recintos cerrados y 150 en espacios abiertos, donde se incluyen los conciertos, hará posible la reapertura de teatros, salas de cine, circos y otros lugares podrán abrir en comunas que se encuentren en Fase 3, siempre que exista un espacio mínimo de cuatro metros cuadrados por persona.

En la Región Metropolitana, por ejemplo, las comunas que hoy tendrán la posibilidad de abrir estos espacios culturales son Quilicura, Huechuraba y San Bernardo.

En el resto del país, algunas de las comunas que también se encuentran en fase 3 son: Algarrobo, Cartagena, Cauquenes, Panguipulli y Rengo.

Otra modificación que se introdujo en fase 3 es que se permitirá la venta de comida en las mencionadas actividades, pero siempre que se disminuya el aforo: un máximo 50 personas en lugares cerrados y de 100 en espacios abiertos.

En la fase 4, los aforos máximos se aumentan a 150 personas en recintos cerrados y 300 en lugares abiertos. Con venta de comida el funcionamiento se permite con 100 y 200 personas, respectivamente.

A modo de precisión, la Resolución 43 del Ministerio de Salud explica específicamente a qué se refiere cada uno de los espacios mencionados en estas modificaciones.

Espacio abierto o aire libre: aquel que no tiene techo o aquel que, teniendo techo, cuenta con más del 50% de su perímetro sin muros. No se considerará techo aquella estructura que permita la circulación de aire a través de ella.

Espacio cerrado: aquel que tiene techo y más del 50% de su perímetro con muros.

Para el correcto funcionamiento

Para los eventos con público en que los asistentes tienen ubicación fija es posible realizarlos manteniendo ciertas normas y protocolos, precisados en la nueva resolución del Minsal: no se podrán sumar los aforos de espacios abiertos y cerrados. Deberá utilizarse mascarilla de forma permanente. Podrán realizarse actividades distintas simultáneamente en lugares que cuenten con espacios abiertos y cerrados, pero los asistentes de unos y otros no podrán tener ningún tipo de interacción, incluyendo baños y entradas y salidas.

Cámara aprueba y despacha a ley el proyecto Fogape 2.0

REACTIVACIÓN. La iniciativa flexibiliza el acceso a financiamiento para pymes.
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Por 82 votos a favor, 37 en contra y 12 abstenciones, la Cámara de Diputadas y Diputados aprobó el proyecto que modifica el Fondo de Garantía para Pequeños Empresarios, más conocido como Fogape 2.0 o "Fogape Reactiva".

La iniciativa ya había sido aprobada por el Senado y por la misma cámara baja en una instancia previa, por lo que ahora fue despachada y quedó en condiciones de ser promulgada por el Ejecutivo.

El texto busca potenciar la reactivación económica mejorando las condiciones de acceso al financiamiento para las empresas de menor tamaño.

El Fogape es un mecanismo a través del cual el Estado garantiza el capital entregado en los créditos que otorgan las instituciones financieras.

Entre las modificaciones aprobadas por los diputados se encuentra una indicación presentada por el Ministerio de Hacienda, que establece que el interés a cobrar por la banca de manera anual no podrá ser superior a la Tasa de Política Monetaria (TPM) más un 0,6% mensual, es decir una tasa de 7,2% anual.

Una de las medidas de apoyo que considera el Fogape 2.0 es la extensión del tope máximo de ventas netas anuales que se utiliza como requisito para acceder a la garantía del fondo. De manera transitoria, hasta el 31 de diciembre de 2021, podrán acceder las empresas que facturen hasta 1.000.000 de UF, con lo cual aumenta el rango de empresas que pueden beneficiarse.

Por otra parte, la norma flexibiliza las condiciones de uso, permitiendo que los créditos se utilicen en el pago de deudas, inversiones y capital de trabajo.

El ministro de Hacienda, Ignacio Briones, valoró el despacho de la ley. "Permitirá seguir expandiendo el crédito y apoyo a pymes a través de garantía estatal. Agradezco a la celeridad y aprobación de esta importante ley a la Cámara y el Senado", dijo.

Parlamentarios de oposición, en tanto, demandaron medidas más integrales y transferencias directas a las personas. "El mercado debe tener una inyección de liquidez dándole un ingreso a las familias que hoy no tienen empleo por la crisis, con eso las pequeñas empresas también se reactivan producto del comercio", manifestó, por ejemplo, el diputado del Partido Socialista Gastón Saavedra.

¿Respirar o comer?

Dr. Manuel José Irarrázaval
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En estos momentos enfrentamos un importante aumento de los contagios por covid-19. A pesar de los esfuerzos y campañas que los responsables del manejo de la pandemia han implementado, no falta quienes aprovechan esta circunstancia para apuntar con el dedo y censurar a nuestras autoridades, olvidando que una enorme mayoría de los países, incluso muy desarrollados, enfrentan una situación similar o peor.

Esta pandemia es una experiencia nueva, de la que no conocíamos sus características y para la cual estábamos poco preparados y no teníamos respuestas comprobadamente eficaces. La respuesta generalizada en todos los países, incluido Chile, fue "esconderse del virus". Porque en último término, eso es lo que implican las cuarentenas implementadas mundialmente.

Esta es una estrategia probadamente eficaz, por cuanto el virus se transmite de persona a persona cuando tiene contacto cercano con un enfermo.

Sin embargo, tiene costos que se manifiestan en plazos medianos o tardíos. Algunos ya son muy visibles en nuestro país, como son el deterioro de la convivencia doméstica; la postergación de atenciones médicas, que a veces implican enfermedades complejas afectando la calidad y los años de vida; el daño a la estructura económica y productiva y el consecuente aumento de la cesantía; el deterioro en la educación y los progresivos costos emocionales y de salud mental. Esta situación ha hecho que en algunas ciudades del país las personas comiencen a rebelarse a estas medidas, como sucedió en Magallanes.

El dilema entonces se podría caracterizar como escoger entre las alternativas de respirar o comer. La supresión de la respiración es fatal en pocos minutos, la de la alimentación, en pocos días, pero ambas son fatales.

Por lo tanto, no es razonable plantear cuarentenas totales interminables. Debemos perfeccionar la estrategia de diagnóstico oportuno y las restricciones de la movilidad, en forma selectiva y flexible, de modo de disminuir los "costos" de la cuarentena y minimizar los riesgos de contagio, de manera muy focalizada.

La esperanza en la vacuna no ofrecerá protección masiva como para "volver a lo de siempre" hasta tener vacunado a cerca del 75% de la población, más o menos 15 millones de personas. Esta es una tarea monumentalmente compleja, agravada por algunos que rechazan vacunarse, además de disponer de la cantidad de vacunas que se necesitan, con una logística difícil por las condiciones de cuidado de la vacuna, por lo que es previsible que alcanzar la cobertura deseada tomará varios meses.

Por eso la responsabilidad individual y colectiva. Este virus se difunde por gotas de saliva que salen de la boca de personas contagiadas, muchas veces asintomáticas, y no llega habitualmente a más de 1,5 metros de distancia. Por eso se debe usar la mascarilla, lavarse frecuentemente las manos, respetar la distancia física y todas las restricciones del Plan Paso a Paso, fundamentalmente los aforos de las reuniones sociales y familiares y evitar los desplazamientos innecesarios.

Controlar la epidemia no es sólo una responsabilidad del Estado, ni de las autoridades, sino de todos nosotros.

"La esperanza en la vacuna no ofrecerá protección masiva como para "volver a lo de siempre" hasta tener vacunado a cerca del 75% de la población".

El doctor Manuel José Irarrázaval es presidente del Instituto de Políticas Públicas en Salud de la Universidad San Sebastián (IPSUSS).