SAG y Superintendencia de Medioambiente harán monitoreo de plan para relocalizar chinchillas
DIEGO DE ALMAGRO. Seremi de Medioambiente explicó proceso que lleva adelante minera por proyecto Salares Norte.
El Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) junto con la Superintendencia de Medioambiente monitorearán la relocalización de 25 chinchillas de cola corta, animal en peligro de extinción que se encuentra habitando en el sector donde se realiza el nuevo proyecto de la empresa minera Gold Fields, "Salares Norte".
El seremi de Medioambiente, Guillermo Ready, señaló que "en nuestro país los proyectos de inversión mineros son analizados en el marco del Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA) en donde se exigen medidas de mitigación de los impactos que los proyectos pueden generar y, entre ellos, programas de relocalización de fauna. Estos compromisos no son voluntarios, sino que obligatorios y su cumplimiento es fiscalizado por la Superintendencia del Medio Ambiente. Esta institucionalidad permite ejecutar iniciativas que contemplen el resguardo del medio ambiente y compensen los impactos que tengan".
Agrega que "en la evaluación ambiental de este proyecto minero, uno de los temas de centrales fueron los impactos que tendrían sobre la chinchilla de cola corta, por lo que los organismos competentes darán un estricto seguimiento a las medidas exigidas. De hecho, el monitoreo de esta relocalización estará en manos del SAG y de la Superintendencia del Medio Ambiente".
Además, menciona que en su evaluación ambiental se les exigió reconocer su impacto significativo en el medioambiente por la alteración del hábitat de la Chinchilla Chinchilla. "Se deberán tomar diversas medidas de mitigación y compensación, tendientes a conservar a la especie. El titular presento un "Plan de rescate y relocalización de ejemplares de Chinchilla Chinchilla" que busca asegurar la supervivencia de la especie y el seguimiento de condiciones adecuadas en su nuevo hábitat. Las capturas requeridas deberán tener el permiso sectorial del SAG", informó la autoridad. "En caso de que la empresa no cumpla una de dichas medidas se arriesga a importantes sanciones, cada vez que se trata de un impacto ambiental significativo y de una especie de enorme interés dado su actual estado de conservación", continuó.
Asimismo, comentó que desde la Seremi y el Departamento de Conservación de Especies se encuentran trabajando en un plan de resguardo. "Nos encontramos gestionando el Plan de Recuperación, Conservación y Gestión de la Chinchilla de Cola Corta, que precisamente abarca el resguardo de la especie entre las regiones de Arica y Parinacota y la de Atacama".
Reubicación
Según el medio internacional The Atlantic, la operación para la relocalización de esta especie trata de capturar a estos animales en pequeñas jaulas y luego trasladarlas a un área segura a más de cinco kilómetros del lugar. "Usamos una trampa que se ceba adentro y se cierra cuando entra la chinchilla", explicó Luis Ortega, gerente medioambiental de la empresa y quien supervisa esta reubicación.
Además explica que, "ese dispositivo, una trampa Tomahawk, suena temible pero no letal. El cebo es una mezcla de almendras, cáscaras de nuez y hierba, con un sabor añadido que los roedores encuentran curiosamente irresistible: extracto de vainilla".
Cabe señalar que la empresa ha gastado más de 400 mil dólares hasta el momento para remover a esta especie, quienes habitan el sector donde se encontrarían 3,5 millones de onzas de oro.
"En caso de que la empresa no cumpla una de dichas medidas se arriesga a importantes sanciones" Guillermo Ready Seremi de Medioambiente