Hernán Calderón Argandoña quedó en prisión preventiva
QUERELLA. Tribunal autorizó que inicie el cumplimiento en clínica siquiátrica.
Redacción
La jueza Andrea Díaz Muñoz, titular del Cuarto Juzgado de Garantía de Santiago, decretó la prisión preventiva para Hernán Calderón Argandoña, luego de que su padre, Hernán Calderón Salinas, presentara una querella para que se investigue por posible parricidio frustrado. Al final de la audiencia, la magistrada accedió a la petición de la defensa del joven para que inicie el cumplimiento de la medida cautelar en la clínica siquiátrica en la que se había internado.
La audiencia telemática se inició con la petición de su defensa de que no se transmitiera en vivo toda la discusión, lo que fue rechazado por la jueza Díaz.
El fiscal Omar Mérida dio cuenta de las cuatro acusaciones que se le hacían al hijo de la animadora de televisión Raquel Argandoña: dos por parricidio frustrado, una por daños y lesiones y otra por porte y tenencia ilegal de armas.
El primero de estos hechos, dijo el representante del Ministerio Público, se produjo el 5 de junio pasado, cuando el joven habría puesto una pistola en el pecho de su padre, habría amenazado con matarlo y luego habría disparado en otra dirección, lo que calificó como parricidio frustrado. El segundo fueron supuestos golpes contra Calderón Salinas y evidencias fotográficas de la destrucción de una serie de objetos y trajes del progenitor, los que habrían ocurrido el 6 de junio.
La tercera imputación, también por parricidio frustrado según la Fiscalía, fue el supuesto ataque de Calderón Argandoña a su padre con un cuchillo que le causó varias heridas a este último el 11 de agosto. A esto sumó que al ser registrada la casa del imputado se encontraron varias armas y municiones que podrían contravenían la ley de control de armas.
Por todo ello, que fue respaldado con fotos y testimonios de la pareja de la víctima, la asesora del hogar y Raquel Calderón, hija del querellante y hermana del querellado, Mérida pidió la medida cautelar de prisión preventiva para el acusado por considerarlo "un peligro para la seguridad de la sociedad y de la víctima", lo que fue respaldado por la parte querellante, representada por el abogado Reyniero García de la Pastora.
Defensa y resolución
En representación de la defensa habló el abogado Mario Vargas, quien buscó desacreditar la gravedad de las imputaciones.
En el caso del disparo el defensor afirmó que "en ningún caso se puede hablar de parricidio frustrado" ya que el joven, entrenado para manejar armas por su afición al tiro, si hubiera querido percutar contra el cuerpo de su padre lo habría hecho: "Esto se llama delito de amenazas".
Respecto de los daños, Vargas sostuvo "no hay registro, no hay denuncia, solo testimonio del querellante" respecto a quién fue el causante.
Del episodio más grave relatado por la parte acusadora, que fue el ataque con cuchillo, el defensor afirmó que Calderón Argandoña no tuvo "ninguna intención de haber puesto en riesgo la vida de su padre. Al otro día estaba en su casa de alta".
Además aportó antecedentes de supuestos abusos sexuales del querellante contra la pareja de su hijo, lo que, afirmó, generó dicha reacción. La jueza desestimó, por ahora, incluir dichos antecedentes por tratarse de otra querella cuya admisibilidad desconocía.
Tras ello, Vargas, pidió que su representado fuera enviado de vuelta a la clínica psiquiátrica en la que estaba internado a causa de problemas de "control de impulsos e inmadurez".
Finalmente la jueza descartó el parricidio frustrado en el primer episodio, pero lo aceptó en el caso del ataque con un arma blanca, por lo que decretó la prisión preventiva de Calderón Argandoña, pero aceptó la petición de la defensa de enviarlo a la clínica "El Cedro" de La Reina hasta que sea compensado en su tratamiento, tras lo cual deberá ser trasladado a la cárcel Santiago 1.