Secciones

  • Portada
  • Actualidad general
  • Opinión
  • Actualidad general
  • Deportes
  • Clasificados
  • Servicios
  • Espectáculos
  • Contraportada

China responde a sanciones de EE.UU. y veta a cuatro altos cargos

DIPLOMACIA. Un diplomático y tres parlamentarios no podrán ingresar a China como respuesta ante las medidas que estableció Washington.
E-mail Compartir

Agencias

China anunció que prohibirá la entrada al país a varios funcionarios estadounidenses en respuesta al veto que Washington impuso el pasado jueves a tres dirigentes del Partido Comunista Chino (PCCh), por su supuesta implicación en los abusos sobre la población uigur en la provincia china de Xinjiang.

En concreto, China prohibirá la entrada de los senadores Marco Rubio y Ted Cruz, del congresista Chris Smith, del embajador en general de los Estados Unidos para la Libertad Religiosa Internacional, Sam Brownback, y de la Comisión Ejecutiva del Congreso sobre China (CEEC) que supervisa la evolución de los derechos humanos y el Estado de derecho en China.

"China impone sanciones contra estas personas en respuesta a las infracciones de Estados Unidos. Sus medidas suponen una injerencia en asuntos internos, y violan el derecho internacional y las relaciones internacionales", afirmó en rueda de prensa la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores Hua Chunying. "Pedimos a Estados Unidos que retire sus sanciones. Tomaremos más medidas en función de cómo evolucione este asunto", añadió Hua, quien reiteró que "China tiene la determinación de salvaguardar su soberanía e integridad territorial".

Como consecuencia de la decisión anunciada el pasado jueves, Chen Quanguo, jefe del PCCh en Xinjiang; Zhu Hailun, secretario del Partido en el Comité Político y Legal de la provincia, y Wang Mingshan, secretario del Partido en la Oficina de Seguridad Pública de Xinjiang, así como sus familiares cercanos, no podrán entrar en los Estados Unidos.

El gobierno de EE.UU. alegó que esta no es la primera ocasión en la que Chen desarrolla una actividad opresiva contra las minorías en China, pues antes de desplazarse a Xinjiang había ejercido cargos similares en el Tíbet. El jueves, el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, aseguró que "Estados Unidos no esperará ociosamente mientras el PCCh lleva a cabo abusos de los derechos humanos sobre las etnias uigur y kazaja, y los miembros de otras minorías en la provincia de Xinjiang".

El jefe de la diplomacia de EE.UU. aseguró que dichos abusos incluyen "trabajos forzados, detenciones masivas arbitrarias, control forzoso de la población e intentos de acabar con la cultura y la fe musulmanas". Pompeo anunció también que estas restricciones se aplicarán sobre otros miembros del PCCh relacionados con los supuestos abusos de los derechos humanos en esta región china, así como sus familiares, aunque no especificó sus identidades.

Mar meridional

En la serie de conflictos diplomáticos entre ambos países, ayer Estados Unidos declaró formalmente "ilegales" prácticamente todos los reclamos chinos de soberanía en el Mar de China Meridional, en una escalada en la política de rechazo de Washington a los avances de Pekín en esa zona llena de disputas territoriales.

"Dejamos claro que los reclamos de Pekín sobre recursos lejanos a la costa en la mayoría del Mar de China Meridional son completamente ilegales, como también lo es su campaña de intimidación para controlarlos", dijo el secretario de Estado de EE.UU, Mike Pompeo, en un comunicado.

Esta es la primera vez que articula esa postura formalmente por escrito, en un comunicado que incluso detalla el perímetro que considera fuera del control legítimo de China.

Exportaciones a Hong Kong

La Unión Europea (UE) también entró en conflicto con China ayer, luego de anunciar que estudia reforzar el control sobre las exportaciones de tecnologías "específicas y sensibles" a Hong Kong, como parte de su respuesta a la nueva ley de seguridad china que impone cadena perpetua para casos de "secesión" o "subversión contra el poder estatal". "Miramos las posibilidades de escudriñar más las exportaciones de tecnologías específicas y sensibles a Hong Kong", dijo el representante de la UE de Asuntos Exteriores, Josep Borrell.

Fiscales forman coalición para revertir prohibición de visado

EE.UU. Orden federal perjudica a estudiantes extranjeros.
E-mail Compartir

Una coalición de 18 fiscales de Estados Unidos, encabezados por los de Massachusetts, presentaron una demanda para detener la orden del gobierno de Donald Trump que amenaza con prohibir los visados a estudiantes internacionales que tomen sus clases de manera virtual el próximo otoño en ese país.

La querella, presentada en el tribunal del distrito de Massachusetts, está dirigida contra el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés) y una de sus agencias, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, en inglés), según un comunicado de la oficina de la fiscal de Massachusetts, Maura Healey. La acción incluye una solicitud de "reparación preliminar inmediata", con lo que buscan que se emita una orden judicial que evite que la nueva regla entre en vigor.

Los fiscales, agrega, llaman la atención sobre la acción "cruel, abrupta e ilegal del Gobierno federal para expulsar a estudiantes internacionales en medio de la pandemia que ha provocado muertes y trastornos" en todo el país. "Massachussets es el hogar de miles de estudiantes internacionales que hacen contribuciones invaluables a nuestras instituciones educativas, comunidades y economía", señaló Healey, al defender que están tomando esta acción para asegurar que estos alumnos "puedan seguir viviendo y aprendiendo en este país". El pasado 6 de julio, ICE anunció modificaciones a las exenciones temporales para los alumnos no inmigrantes del Programa de Estudiantes y Visitantes de Intercambio (SEVP), entre ellas no otorgar visados a los matriculados en escuelas que hayan decidido dictar sus programas complemente en línea.

Suspenden ejecución federal

En respuesta a la apelación de cuatro condenados a muerte, la jueza federal, Tanya Chutkan, bloqueó ayer la intención del gobierno de EE.UU. de reanudar la aplicación federal de la pena de muerte, cuando faltaban unas horas para la primera ejecución federal desde 2003.

Putin manifiesta el malestar ruso por mezquita Santa Sofía

CONFLICTO. Comunicó su descontento por reconversión de basílica en Estambul.
E-mail Compartir

El presidente ruso, Vladímir Putin, comunicó a su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, el malestar que provocó en Rusia la decisión de Ankara de reconvertir en mezquita la antigua basílica de Santa Sofía.

El mandatario ruso "llamó la atención de Recep Tayyip Erdogan sobre la importante desaprobación que provocó en Rusia la decisión de cambiar el estado de la iglesia de Santa Sofía en Estambul", señaló el Kremlin en un comunicado tras una conversación telefónica entre ambos líderes. Según la presidencia rusa, Erdogan "dio las explicaciones relevantes y señaló que el acceso a este monumento único de la civilización mundial estará garantizado para todos, incluidos los ciudadanos extranjeros, y se preservarán los santuarios cristianos".

El presidente de Turquía reivindicó el pasado viernes la conquista de Constantinopla por el Imperio Otomano en 1453 como fundamento de un supuesto derecho de su país para que la antigua basílica de Santa Sofía, hasta hoy un museo, vuelva a ser una mezquita, como lo fue hasta 1934. La Iglesia ortodoxa rusa lamentó enseguida la decisión y advirtió de que este paso puede tener "graves consecuencias para toda la civilización humana".

Previamente, el patriarca de la Iglesia ortodoxa rusa, Kiril, había instado a Turquía a mantener el estatus neutral de la basílica y recalcó que se trata de "uno de los mayores monumentos de la cultura cristiana".

Negociación libia y ue

Los dos mandatarios abordaron además la importancia de intensificar los esfuerzos para promover una solución al conflicto sirio y la necesidad de un fin temprano de la confrontación armada y el retorno al proceso de negociación en Libia.

Putin y Erdogan intercambiaron además puntos de vista sobre ciertos temas de la agenda bilateral, incluidas las perspectivas para la reanudación del turismo entre ambos países a medida que mejore la situación sanitaria y epidemiológica tras el coronavirus.

Ayer, mientras tanto, la Unión Europea también se sumó a las críticas a Turquía por varias razones, incluida la exploración en aguas mediterráneas disputadas y el cambio de Santa Sofia. "Cuando veo ahora lo que está sucediendo con Santa Sofia, eso es un golpe", dijo el canciller luxemburgués Jean Asselborn. Turquía también está en el ojo del huracán porque ha enviado barcos exploradores escoltados por buques de guerra en busca de yacimientos de gas en un área donde Chipre insiste que tiene derechos exclusivos.